Reineke inscribió su nombre junto a otros grandes de su equipo
El derecho es el primer importado melenudo que abre dos inauguraciones seguidas. El grandeliga de los Rojos no vino a ponchar rivales, pero se siente más preparado para sacar outs
Chad Reineke no quiere engañar a los fanáticos del Caracas.
“No soy un ponchador”, atajó el pitcher derecho, al recordar su primera apertura esta temporada en el beisbol profesional venezolano. “Esos tres ponches del inning inicial me sorprendieron incluso a mí. No es mi juego”.
Reineke se convirtió el miércoles en el primer pitcher importado que comienza dos encuentros inaugurales para los Leones.
El estadounidense, además, ingresó al escueto club de lanzadores melenudos con inauguraciones consecutivas, un listado donde sólo pululaban criollos y al que Edwin Hurtado había sido el último en ingresar, con sus salidas de 2004 y 2005.
El actual número uno de los capitalinos, sin embargo, no se considera un as, a la hora de describir sus herramientas.
“Yo dependo de mantener la bola bajita y en strike”, relató. “Tal vez (los bateadores de los Bravos) tuvieron problemas porque no me habían enfrentado antes. Y quizás volvieron al dugout, hablaron con sus compañeros y les explicaron cómo eran mis envíos”.
Si Margarita halló el modo de conectar esa tarde los pitcheos del grandeliga, poco importó. En los siguientes cuatro tramos sólo abanicó a uno más, pero sacó otros cuatro ceros, se fue con dos hits en contra y la satisfacción del deber cumplido.
Para Reineke hay una gran diferencia entre su actual desempeño y la primera vez que inauguró una campaña en Venezuela.
“Haber venido esta vez con más tiempo me sirvió de mucho para ponerme en forma”, explicó. “Hace un año, me sentía como si me hubieran apurado. Esta vez logré llegar a mi primera salida en mejores condiciones. Llegué al encuentro sintiéndome listo, sintiéndome mucho mejor”.
El nativo de Defiance, un pueblito del estado de Ohio, también cree que la experiencia recabada en la 2010-2011 le permitirá ser un mejor competidor en esta ocasión.
“Mi sensación en la inauguración del año pasado fue completamente diferente a la de esta oportunidad”, aseguró. “Cada vez que te enfrentas a un nuevo ambiente, sientes algún tipo de presión. Aquella fue mi primera vez delante de los fanáticos y uno busca dejar una buena impresión”.
El cuerpo de Reineke reaccionó bien al esfuerzo del miércoles.
“Tengo algo de dolor en el brazo, pero eso es normal después de lanzar”, apuntó. “El brazo está fuerte. Me siento muy bien”.
Y no necesita sumar ponches para demostrarlo.
Julio Bracho (1955 a 1958), Víctor Davalillo (1959 y 1960), Luis Peñalver (1980 y 1981), Ubaldo Heredia (1982 y 1983), Ubaldo Lugo (1989 y 1990, 1992 a 1994) y Edwin Hurtado (2004 y 2005) eran los únicos que abrieron juegos inaugurales consecutivos de los Leones, antes de Chad Reineke
Chad Reineke había prometido que no prestaría atención al público, para no distraerse durante la inauguración de la temporada en el estadio Universitario. Y cumplió.
“Para mí, el momento de ver a las tribunas es cuando salgo del dugout y camino hacia el bullpen, un rato antes del partido”, aseveró. “En esa caminata sí disfruté del ambiente. Era una multitud. Pero después, cuando me subo al montículo para calentar, me desentiendo de eso. Hay cientos de personas que gritan tu nombre y uno quisiera saludarlos a todos, pero debes concentrarte”.
El miércoles lo hizo.
“Cuando llega la hora del partido, sólo tengo un objetivo: me enfoco en poner la pelota donde está la mascota y me olvido de lo demás”.
Publicado en El Nacional, el viernes 14 de octubre de 2011.