¿Y dónde está el piloto? Seth Etherton cerró con problemas el quinto, por primera vez en el juego, pero el manager Buddy Bailey se la juega contra su costumbre y lo manda al morrito en el sexto. El triple de Oscar Salazar y el jonrón de Luis Jiménez prueban que erró, acaban con la joya de Etherton e igualan el juego. Pero el bullpen es punto fuerte de los Tigres y Rómulo Sánchez acaba la amenaza.
Pican como una abeja. Los Tigres no llegaron a la final por la fuerza de sus bates, sino por su habilidad para ejecutar. Y con el duelo empatado, atacan al Cerrador del Año con un doble y un sencillo que rompe el empate, gracias a la complicidad de la defensa guairista. El bateador-corredor avanzó con el tiro al home, llegó a tercera con un rodado y anotó con un infieldhit la del seguro.
Dulce venganza. Un error de Adonis García metió en problemas a Rómulo Sánchez y puso a José Mijares en la loma contra Luis Jiménez, con Alex Cabrera en el círculo de espera. El momento de la noche. Jiménez la rodó por segunda y empujó la tercera, para que Mijares y Cabrera dirimieran sus diferencias de pitcher a bateador, con el empate en el plato. Ganó el zurdo y allí salvó el juego.
Publicado en El Nacional, el viernes 27 de enero de 2012.