Los Bravos abrieron su campo de entrenamiento, con 33 jugadores, al manos del manager Marco Davalillo.
Las puertas se abrieron en el estadio Independiencia con los veteranos Luis Chirinos, Renee Cortez, Leonardo Astorga, Kristian Linares y Luismar Peña, uno de los dos invitados que hasta ahora ha convocado la divisa insular.
Alex Monsalve, uno de los señalados por Davalillo para ir ocupando los espacios que ha llenado hasta ahora Henry Blanco, fue uno de los receptores que acudió a Puerto Cabello desde temprano.
Toda la plana mayor estuvo con Davalillo, al abrirse el campo. Además del gerente general Yves Hernández y el gerente deportivo Iván Arteaga, presenció los trabajos el asesor de la presidencia de la divisa, Rubén Mijares.
Arteaga, de acuerdo con el departamento de prensa del club, se mostró muy satisfecho con el liderazgo del estratega. Es la primera vez en tres años que el timonel del equipo toma las riendas desde el primer día, algo que no pudo ocurrir con Don Baylor ni con Hensley Meulens en las últimas dos zafras.
El pitcher Ángel Nesbitt, de buena temporada en las menores este año, fue uno de los primeros en reportarse.
Dos brazos experimentados son esperados este martes en el estadio Independencia. Se trata del ex bigleaguer Carlos Monasterios y Marcel Prado. Un tercer monticulista, Silfredo García, llegó el lunes cuando finalizaba el entrenamiento y se pondrá el uniforme junto a Monasterios y Prado.
Luismar Peña, uno de los dos invitados de los Bravos, se incorporará durante esta semana. El otro, Rodney Medina, lo hará el lunes 23.
