Hablemos de Bob Abreu, de C.J. Retherford, del empuje de las Águilas, de cómo el juicio impulsivo de un fanático le hace incurrir en errores que no comete el aficionado
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| Bob Abreu |
Levante la
mano quien abucheó a Bob Abreu. Dé un paso al frente quien pidió su retiro a
través de las redes sociales.
mano quien abucheó a Bob Abreu. Dé un paso al frente quien pidió su retiro a
través de las redes sociales.
Las
tribunas del estadio Universitario han pasado de la sonora silbatina, a
comienzos de noviembre, a este aplauso sostenido desde diciembre, cada vez que
el Comedulce impone una marca o sacude otro jonrón.
tribunas del estadio Universitario han pasado de la sonora silbatina, a
comienzos de noviembre, a este aplauso sostenido desde diciembre, cada vez que
el Comedulce impone una marca o sacude otro jonrón.
Nunca como
en estos tiempos, la masa ha dado mayores muestras de su veleidosa mutabilidad.
Los mismos que pitaron a Abreu hoy celebran sus batazos.
en estos tiempos, la masa ha dado mayores muestras de su veleidosa mutabilidad.
Los mismos que pitaron a Abreu hoy celebran sus batazos.
¿Recuerdan
cómo Jesús Guzmán vivió algo similar? Poco después de implantar el récord de
impulsadas en una temporada, el sucrense pasó por un slump que le convirtió en
blanco de sus propios parciales.
cómo Jesús Guzmán vivió algo similar? Poco después de implantar el récord de
impulsadas en una temporada, el sucrense pasó por un slump que le convirtió en
blanco de sus propios parciales.
Hasta el
gran Mike Schmidt, la principal estrella ofensiva que han tenido los Filis, recibió
un trato así. No importaron sus 548 jonrones ni su absoluta fidelidad a
Filadelfia, ya en plena era de la libre agencia, que le habría permitido buscarse
un mejor salario y otra ciudad.
gran Mike Schmidt, la principal estrella ofensiva que han tenido los Filis, recibió
un trato así. No importaron sus 548 jonrones ni su absoluta fidelidad a
Filadelfia, ya en plena era de la libre agencia, que le habría permitido buscarse
un mejor salario y otra ciudad.
Esa urbe y
Nueva York son parecidas a Caracas. Les une el carácter duro de las grandes
metrópolis, que quizás no tengan poblaciones menos ajetreadas.
Nueva York son parecidas a Caracas. Les une el carácter duro de las grandes
metrópolis, que quizás no tengan poblaciones menos ajetreadas.
El fanático
es impaciente. Mientras el aficionado puede ver más allá, perdona errores
humanos y reconoce trayectorias, el fanático es fiel a las características que
lo definen.
es impaciente. Mientras el aficionado puede ver más allá, perdona errores
humanos y reconoce trayectorias, el fanático es fiel a las características que
lo definen.
“Que
defiende con tenacidad desmedida y apasionamiento creencias u opiniones”, dice
la Real Academia de la Lengua. “Preocupado o entusiasmado ciegamente por algo”.
defiende con tenacidad desmedida y apasionamiento creencias u opiniones”, dice
la Real Academia de la Lengua. “Preocupado o entusiasmado ciegamente por algo”.
Ciegamente.
Hubo un momento de octubre en que C.J. Retherford parecía al borde del despido.
Él y el manager Tony DeFrancesco eran el centro del descontento de los
seguidores guairistas, al punto de que la gerencia admitió, un martes, que los
hechos por venir en esa semana que estaba comenzando decidirían la permanencia
de ambos.
Hubo un momento de octubre en que C.J. Retherford parecía al borde del despido.
Él y el manager Tony DeFrancesco eran el centro del descontento de los
seguidores guairistas, al punto de que la gerencia admitió, un martes, que los
hechos por venir en esa semana que estaba comenzando decidirían la permanencia
de ambos.
Poco o nada
se sabía de DeFrancesco como piloto. De hecho, la opinión sobre su trabajo debe
haber mejorado muy poco en la legión litoralense. Pero Retherford ya había
bateado aquí, en la eliminatoria y en los playoffs, la pasada temporada. Al
menos en su caso, había razones para la paciencia.
se sabía de DeFrancesco como piloto. De hecho, la opinión sobre su trabajo debe
haber mejorado muy poco en la legión litoralense. Pero Retherford ya había
bateado aquí, en la eliminatoria y en los playoffs, la pasada temporada. Al
menos en su caso, había razones para la paciencia.
Finalmente,
los Tiburones se enracharon, el “Conejo” consiguió su ritmo con el madero y se
convirtió en el escudero perfecto de Alex Cabrera en el lineup.
los Tiburones se enracharon, el “Conejo” consiguió su ritmo con el madero y se
convirtió en el escudero perfecto de Alex Cabrera en el lineup.
Luis
Dorante hizo un llamado a los aficionados de las Águilas, en un mal momento de
la divisa, hace poco más de un mes.
Dorante hizo un llamado a los aficionados de las Águilas, en un mal momento de
la divisa, hace poco más de un mes.
“Necesitamos
su apoyo. Los peloteros están entregando lo mejor para poder salir de esto”,
dijo el estratega, palabras más, palabras menos.
su apoyo. Los peloteros están entregando lo mejor para poder salir de esto”,
dijo el estratega, palabras más, palabras menos.
La
fanaticada zuliana no sólo abucheaba a Dorante, también a sus jugadores. La
crisis llegó al extremo de un intento de pelea en el dugout, un mitin con
directivos y el despido del cubano Félix Pérez.
fanaticada zuliana no sólo abucheaba a Dorante, también a sus jugadores. La
crisis llegó al extremo de un intento de pelea en el dugout, un mitin con
directivos y el despido del cubano Félix Pérez.
Zulia
despegó después de eso, se metió en la semifinal y era uno de los favoritos,
luego del draft y debido a las pocas deserciones que sufrió en diciembre.
despegó después de eso, se metió en la semifinal y era uno de los favoritos,
luego del draft y debido a las pocas deserciones que sufrió en diciembre.
Al piloto
siguieron criticándolo, aquí y allá. Es parte de su profesión. Lo sabe
DeFrancesco, lo ha sufrido Dave Hudgens con los Leones y le pasará a casi todo
dirigente, aunque se llame Omar Vizquel.
siguieron criticándolo, aquí y allá. Es parte de su profesión. Lo sabe
DeFrancesco, lo ha sufrido Dave Hudgens con los Leones y le pasará a casi todo
dirigente, aunque se llame Omar Vizquel.
El jueves,
sin embargo, las tribunas del estadio Luis Aparicio despidieron a sus hombres con
aplausos y un reconocimiento unánime a la entrega de los peloteros, que
remontaron un encuentro casi imposible y quedaron al borde del abismo, después
de luchar con denuedo a todo lo largo de la semifinal.
sin embargo, las tribunas del estadio Luis Aparicio despidieron a sus hombres con
aplausos y un reconocimiento unánime a la entrega de los peloteros, que
remontaron un encuentro casi imposible y quedaron al borde del abismo, después
de luchar con denuedo a todo lo largo de la semifinal.
Los
fanáticos seguirán disparando, sin siquiera averiguar después. Pero el renacer
de Abreu, los batazos de Retherford y la lucha hasta el último out de los rapaces
quizás haga que algunos crucen la calle. Exigentes, sí, pero no crueles.
fanáticos seguirán disparando, sin siquiera averiguar después. Pero el renacer
de Abreu, los batazos de Retherford y la lucha hasta el último out de los rapaces
quizás haga que algunos crucen la calle. Exigentes, sí, pero no crueles.
Ya no
fanáticos, sino buenos aficionados.
fanáticos, sino buenos aficionados.
Publicado en El Nacional, el sábado 18 de enero de 2014
