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| Conrado Marrero y Daniel Canónico |
Daniel Canónico, el pitcher que abrió y ganó el juego más importante en la historia de beisbol venezolano, cumplió 100 años de nacido esta semana, al arribar el deporte nacional al centenario del legendario mirandino, este miércoles.
El Chino Canónico, fallecido en 1975, fue el as de la selección nacional en la Serie Mundial Amateur de 1941, ganada por el equipo criollo en La Habana, contra todo pronóstico, por ocurrir ante la favorita novena representante de Cuba y su mejor monticulista, el también legendario Conrado Marrero.
El derecho nació en Guarenas el 3 de febrero de 1916. Tenía 25 años de edad cuando campeó en el torneo mundialista, al frente de la divisa nativa.
Canónico venció dos veces a Cuba, incluyendo el duelo de desempate disputado en el estadio La Tropical de La Habana, 3 carreras por 1.
El duelo con Marrero fue brillante. Ambos monticulistas trabajaron en blanco los últimos ocho innings.
La celebración ocurrida después del out 27 embargó a toda Venezuela, que siguió ávidamente las acciones de cada encuentro de esa justa a través de la radio.
No existían transmisiones de televisión y los medios de comunicación en el país tenían un desarrollo limitado.
Tampoco existía el deporte profesional organizado y las delegaciones nacionales apenas habían comenzado sus actuaciones fuera de las fronteras, con la presencia en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, la década anterior.
El pueblo bautizó como «Los Héroes del 41» a aquellos peloteros que alzaron la copa en la capital cubana. Cinco años después, el entusiasmo generado a propósito de eso permitió el nacimiento de la LVBP.
Canónico lanzó ocho torneos en el entonces naciente circuito, con los Sabios del Vargas, primero, y luego con el Cervecería Caracas y los Patriotas del Venezuela. Su última incursión ocurrió con los Leones de Caracas.
Ignacio Serrano
Excelente como todo un Canónico