El Emergente

El Emergente

El niño del Universitario y el Clásico Mundial

Por Ignacio Serrano

Tenía 10 años de
edad aquel niño que saltó al diamante del estadio Universitario, con la V en el pecho, en julio de 1977.
Una multitud veía
desde las tribunas. Padres e hijos llenaron el parque capitalino ese día y otros
más, para ver en acción a los muchachitos que representaban a la Corporación
Criollitos
de Venezuela, como parte de una selección nacional
que copó las primeras planas de los matutinos y las páginas centrales de los
tabloides de ese país que hoy parece tan lejano.
El más aventajado de
aquellos infantes que celebraron la conquista del campeonato en esa ocasión
volverá a lucir la V,
pero esta vez en la gorra. No estará en las paradas cortas, donde nos acostumbramos
a verle desde tan temprano bautismo de fuego. Ahora será el manager, porque es
Omar Vizquel.
El ex shortstop
caraqueño no esconde el entusiasmo que siente por dirigir la Vinotinto. El lunes fue puesto
oficialmente al frente de la divisa que representará al país en el próximo
Clásico Mundial de Beisbol.
“Estoy contento, muy
contento. Y ansioso, muy ansioso”, subrayó Vizquel, poco después de saberse la
designación.
Ha sido todo un
viaje para él. Siete años después de ese inolvidable torneo, debutaba en la
pelota profesional venezolana, con los Leones del Caracas. A los doce años, se
estrenaba en las Grandes Ligas con los Marineros de Seattle. Casi treinta años
después de aquel Universitario sonreído, recibió su undécimo Guante de Oro, el
último de su brillante colección.
Vizquel nunca negó
que esta era su próxima meta. Poco antes de retirarse, porque algún día iba a
retirarse, y lo hizo en 2012, comenzó a hablar con seriedad sobre dirigir.
Primero a los melenudos, el único equipo de su vida en Venezuela, y por qué no,
eventualmente, en la MLB.
Le bastaron sólo
tres juegos como piloto en Doble A y tres temporadas como coach, primero en las
menores de los Ángeles de Los Ángeles y más recientemente en las mayores con
los Tigres de Detroit. No importa.
Porque el verdadero
currículo de Vizquel no son las coronas que ha ganado como manager, sino su
camino en el beisbol, su ascendencia sobre los compatriotas que hoy brillan en la gran carpa y que serán los
miembros del ese Dream Team que,
dice, tendrá a disposición.
El verdadero
currículo del ex torpedero es su conocimiento del juego y la ambición de ganar;
entonces como pelotero y hoy como estratega.
Vizquel no tiene los
galones de Oswaldo Guillén o Alfredo Pedrique, ni ha celebrado una conquista,
como sí Eduardo Pérez, Carlos García u Omar Malavé. Pero todos sabíamos que
tarde o temprano esto iba a suceder, desde que usó la C de capitán en el primer
Clásico Mundial.
Le quedan 12 meses
de aprendizaje, antes de emprender el nuevo reto, ese desafío que le llegará
exactamente cuatro décadas después de aquel primer roletazo que tomó en el
estadio Universitario. De nuevo con la Vinotinto, pero a los 50 años de edad.
Publicado en Blog.Banesco.com, el miércoles 17 de febrero de 2016. Aquí el original.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

¿Te gustaría recibir notificaciones de El Emergente? Claro que sí Quizás más adelante