Aníbal Sánchez reaccionó bien a su primer esfuerzo desde que fue mandado a parar por los trainers, al sentir dolores en el brazo la semana pasada, informó este lunes el sitio oficial de los Tigres de Detroit, al reportar la sesión de trabajo del derecho en Lakeland.
Sánchez soltó el brazo a una distancia aproximada de 30 metros, sin sentir molestias en la zona afectada. Se espera que repita la dosis después de descansar un día y que suba a 40 metros, siendo llevado con precaución por el cuerpo médico de los felinos.
Es posible que el fin de semana esté en forma para hacer un primer bullpen.
El manager Brad Ausmus dijo que espera tener al aragüeño en la rotación inaugural.
Sánchez sufrió una inflamación en el triceps, cuando estaba por subir al montículo para comenzar a enfrentar bateadores. Esta situación le deja sólo unas cinco semanas para recuperar el ritmo y estar en forma para abrir encuentros en la campaña regular, si no sufre ningún retroceso.
Ignacio Serrano
