El Utility
Gerardo Boscán Villasmil
El béisbol profesional ha cambiado sus latitudes de emprendimiento conforme han pasado los años.
Esos cambios han traído restricciones y abandonos de jugadores en los momentos de mayor apremio en nuestra pelota.
Bien lo explicó Ignacio Serrano aquí en su portal en la columna más reciente de El Emergente titulada El béisbol Venezolano y sus músicos prestados en uno de sus párrafos, citando a uno de los clásicos y más recordados comentaristas del béisbol criollo, John Carrillo.
Se sabe, de hecho, que la meta de todo criollo que por primera vez pisa un campo de pelota a partir de los cinco años es pensando en algún día es llegar a las Grandes Ligas.
En el 2017 será la oportunidad para dos nuevos criollos en los casos más recientemente oficializados por equipos asiáticos con las firmas del zuliano Elvis Araujo y el derecho Jorge Rondón.
Como bien lo dijo Ignacio, el béisbol norteamericano brinda muchas bondades, la mayor es la que viene de lo monetario, es por ello que es tan difícil ver jugadores élite en nuestros estadios entre octubre y enero, salvo casos aislados como los de este año con Freddy Galvis o Alcídes Escobar.
Pero desde hace década y media algunos peloteros venezolanos han decidido tomar, mucho más que antes, el rumbo que tomó Robert Marcano en 1975 cuando llegó a los Bravos de Hankyu, en la Nippon Profesional Baseball, y finalizó su carrera, 10 años después, con las Golondrinas de Yakult. No solo fue el dinero que bien pagan en Japón lo que lo hizo partir, sino la oportunidad de abrirse camino como profesional.
Marcano no pudo hacer el grado grandeliga ni con Cincinnati, ni Cleveland ni California. Sus esperanzas se fueron esfumando con el pasar de los años hasta que le llegó la oportunidad de llegar a Japón. Su hoja de vida habla muy bien entre los foráneos. Es el mayor con Guantes de Diamante (hoy Guantes de Oro) defendiendo la segunda base. Era segundo entre los criollos en partidos jugados al momento de retirarse, y aún lidera entre los participantes latinos en la Serie de Japón, con cuatro.
Sus hazañas han sido claramente superadas por otros sluggers. Alex Ramírez es el más emblemático. Hoy primer y único latino en dirigir en Japón, único con 2.000 imparables y miembro del Club de Jugadores Extraordinarios por la cosecha de imparables que tuvo en brillante carrera, según detalló el grandioso portal Béisbol Japonés.
¿Fue la mejor opción para Araujo y Rondón? Hay que revisar caso por caso.
El primero llegó a las Mayores con un poco más de categoría que el segundo. Fue dejado libre en el 2014 por los Indios de Cleveland y firmado por los Filis de Filaldefia con un contrato garantizado. El segundo, Rondón, esperó todo su proceso con los Cardenales de San Luis hasta su debut en el 2014.
Tanto Araujo como Rondón fueron firmados por los Dragones de Chunichi para comenzar a construir una nueva etapa en sus carreras.
Araujo había sido dejado en libertad por los Filis después de un año poco afortunado. Fue tomado por los Marlins de Miami donde intentaría volver al nivel que mostró en su año debut en el 2015.
El marabino es zurdo, espigado y durante su más reciente participación en la pelota invernal logró retomar la velocidad y dominio que lo hizo tan atractivo hace tres campañas cuando hasta reforzó a los Navegantes del Magallanes en la Serie del Caribe y quedó como el mejor brazo zurdo del certamen.
“Es una gran oportunidad para mí en mi carrera. Me sorprendió un poco que un equipo de Japón se interesara en mí”, dijo Araujo después de finalizar su participación con las Águilas del Zulia.
“Sé que el nivel de las Grandes Ligas es exigente, pero en Japón también lo es, capaz y hasta mucho más, pero nos estamos preparando mentalmente para ello”.
Y tiene razón. La pretemporada es mucho más extensa que en MLB, dura cerca de dos meses y no hay espacios ni para excusas ni llegar fuera de forma.
Además, deberá enfrentarse a una nueva cultura, horario, idioma y tipos de comida. También a una generación de jugadores con una preparación distinta, a pesar que disputan una misma disciplina. No por nada han sido dos veces campeones del llamado Clásico Mundial de Béisbol.
El relevista marabino tendrá un reto mayor ya que fue contratado para ser abridor, un rol que cumplió por última vez cuando estuvo con la organización subcampeona de la MLB.
“Ellos (Chunihi) me hicieron dos propuestas, una como relevista y otra como abridor. Cuando estuve con los Indios de Cleveland mi rol fue como abridor así que es algo que ya conozco bien, a pesar del tiempo que tengo sin hacerlo. Cuando estuve con los Filis en la temporada que pasó les pedí mucho la oportunidad pero no pudimos llegar a esa salida”.
Tiene una batalla ganada. Superó las molestias físicas y recuperó notablemente su velocidad. “Comenzó con menos de 90 mph, al momento de irse ya estaba por encima de esa velocidad y con todas las condiciones para retomar las 95-96 que lanzaba cuando lo conocí”, comentó Wilson Álvarez, coach de pitcheo de los rapaces y parte fundamental de su recuperación.
Cuando se suba a la lomita se convertirá en el cuarto zuliano en montarse en la lomita que inauguró Luis Mercedes Sánchez. Los otros tres: Darwin Cubillán (2005 – 2007), Géremi González (2007) y Enyelberth Soto (2011 – 2014), a quien deberá perseguir por los números que dejó, precisamente, con los Dragones.
La oportunidad de Araujo pareciera ideal. Cuenta con juventud, potencial, una condición de zurdo con fuerza y la mente abierta para seguir una carrera aún en desarrollo.
“Pienso que debo trabajar ahora mucho más y cuidarme al máximo porque sé lo exigente que es, más en una liga como la japonesa. No tengo miedo de ponerme a trabajar de esa manera, solo debo hacer mi mejor esfuerzo para ser constante frente a los bateadores”, expuso.
El caso de Rondón requerirá un poco más de esfuerzo. No ha tenido gran desempeño en las Mayores en sus primeras tres zafras pero pudiera retomar el camino como lo hizo en algún momento Rafael Betancourt y un resaltante regreso a las Mayores que finalizó con un excelente historia en el béisbol de los Estados Unidos.
EL DATO: Según el portal beisboljapones.com han sido 39 los peloteros venezolanos que han jugado en Japón. La lista aumentará a 41 con los posibles estrenos de Araujo y Rondón. 20 de los criollos han sido lanzadores.
Gerardo Boscán Villasmil
@GerardoBoscan
