Guerra y lo pusieron en asignación, una decisión que puso fin a su nueva etapa en las Grandes
Ligas después de solamente tres días, luego de una ausencia que se alargó dos años.
Los lupulosos tienen siete días para cambiarlo, dejarlo en libertad o pasarlo por waivers, en caso de que traten de mantenerlo en la organización.
El diestro estuvo en las Mayores entre 2015 y 2017 con los
Piratas de Pittsburgh, primero, y con los Ángeles de Los Ángeles, los últimos
dos torneos. Pero en 2018 no fue llamado por los Rangers de Texas, a pesar de
tener una cosecha aceptable en las Menores.
con 48 ponches y 10 bases por bolas, una estupenda relación que pavimentó su
camino de retorno a la MLB.