La salida de Pablo Sandoval, el jueves, del equipo donde más y mejor brilló en las Grandes Ligas, causó una poco habitual sucesión de muestras de afecto desde la gerencia y de regreso, desde el jugador, a pesar de cortarse la relación laboral
Por Ignacio Serrano
ElEmergente.com
El adiós que este jueves le dieron los Gigantes a Pablo Sandoval fue inesperadamente cálido, a pesar de tratarse de un despido, y es prueba de la huella que el Panda deja en San Francisco, luego de casi tres lustros de su debut con ese equipo en las Mayores.
Sandoval fue sacado del roster activo para ser designado para asignación, con la intención, de acuerdo con el propio departamento de prensa del club, de ponerlo en waivers y dejarlo en libertad si nadie reclama su contrato.
El tuit que publicó el departamento de prensa de los californianos fue la primera señal de que ocurría un rompimiento amigable, marcado por la nostalgia. No es común que se prepare un video conmemorativo a la carrera de un pelotero en situaciones así:
— SFGiants (@SFGiants) September 10, 2020
Tanto en inglés como en castellano, hubo también tuits de despedida y gratitud por parte de los colosos:
Thank you, Pablo. Thank you.#ForeverGiant pic.twitter.com/882jWB7yqm— SFGiants (@SFGiants) September 10, 2020
Sandoval bateó poco esta temporada, luego de regresar de la Cirugía Tommy John. Su lugar como designado y eventual inicialista será ocupado por Justin Smoak, que fue adquirido la víspera y tomó su lugar en el roster.
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El venezolano reaccionó con clase, también, y publicó una despedida en Instagram, que de inmediato el equipo replicó:
📷: kfp48 // Instagram pic.twitter.com/nfZkQOR6WT— SFGiants (@SFGiants) September 10, 2020
Sandoval vivió sus mejores años en San Francisco, incluyendo tres anillos de Serie Mundial. Se declaró agente libre y firmó con los Medias Rojas, iniciando en 2015 lo peor de su tiempo como bigleaguer.
Se recuperó como utility de los occidentales. Tal era su impacto en la cueva y en la afición, que después de declararse agente libre, en noviembre, los Gigantes le dedicaron un video conmemorativo al firmar otra vez, con todo y que ya era solo un jugador de la banca:
Detalles así no son comunes. Hablan con elocuencia de lo que fue la relación entre el Panda y la escuadra emblemática de la ciudad californiana.
