Los Atléticos tienen casi todo a su favor para avanzar a las Series de Campeonato. Casi todo. Pero aunque sean favoritos en las Series Divisionales, han perdido impulso y no parece garantizado un triunfo que pararía el trote de una escuadra que pretende llegar a la Serie Mundial pese a haber tenido récord negativo
Por Ignacio Serrano
ElEmergente.com
El duelo que los Atléticos y los Astros sostienen desde este lunes es, en teoría, un choque desequilibrado entre dos rivales que se vieron las caras 10 veces en la fase regular, con claro dominio de Oakland. Pero aunque haya sido así, el panorama no es completamente favorable para evitar que Houston se convierta en el primer equipo con récord negativo en las Series de Campeonato.
Paquidermos y siderales protagonizan en las Series Divisionales con favoritismo para los A’s. Y hay razones para ver las cosas así.
Los californianos mandaron en la División Oeste. Superaron por siete juegos de ventaja a los texanos. Cerraron con 12 choques sobre .500, mientras que sus adversarios quedaron con dos bajo .500, una diferencia que resultaría inaceptable antes de llegar esta nueva normalidad beisbolera de la pandemia.
La serie particular, además, fue conquistada por los occidentales. Por mucho. Se midieron entre sí con saldo favorable a los favoritos, 7 por 3, con 4 victorias en los últimos 5 cotejos.
Los Atléticos tuvieron 3.77 de efectividad (quintos en las Mayores) contra 4.31 (décimos terceros). Permitieron 16 carreras sucias contra 24. Incluso la ventaja más obvia de los Astros, su bateo, no estuvo muy lejos de sus actuales oponentes, con 4,65 rayitas por choque contra 4,57.
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La única fortaleza de Houston abiertamente superior es la agilidad de su defensa, su alcance, que le da en el Total Zone un registro de +9 contra -3. Pero no fue suficiente para evitar que al final los de Bob Melvin permitieran 3,87 marcas por compromiso contra 4,58 de los conducidos por Dusty Baker.
Así que la lógica beisbolera promete el éxito de los A’s. Y sin embargo, ya vimos que los Medias Blancas expusieron las costuras de sus contrincantes, al apretar con su ofensiva y un staff más que aceptable.
El pitcheo de los outsiders no se compara con el de Chicago, pero la rotación que conforman Chris Bassitt, Jesús Luzardo, Sean Manaea y Frankie Montás no se distancia tanto, en este momento, de la que forman Lance McCullers, Framber Valdez, José Urquidy y Zack Greinke.
Quizás sea la ausencia del lesionado A.J. Puk o la más reciente baja de Matt Chapman, el caso es que Melvin no ha conseguido arrollar desde mediados de septiembre. Sus pupilos dejaron de batear, luego de ser un lineup que produjo mucho en la primera mitad, y su ventaja en esta instancia no se ve abrumadora.
Es una serie corta y las diferencias se ven matizadas. Sí, Oakland en efecto tiene un pie adelante, pero Houston tiene las piezas y la experiencia, así que el más fuerte en el papel está obligado a demostrarlo.
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