Por Alfredo Villasmil Franceschi
[email protected] Domingo
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El panameño Jame Barría se ha convertido, por decirlo de alguna manera, en el pitcher más importante de los Tigres del Licey.
Este panameño, quien pertenece en el beisbol de Grandes Ligas a los Ángeles de Los Ángeles de Anaheim, muestra 0.92 de WHIP en tres salidas, todas como abridor, con 11 ponches en 12.0 entradas y 1.50 de efectividad.
En su pasada salida perdió el Licey, pero mantuvo a los Toros allí, al margen.
“Hasta el momento tengo que quedarme con el equipo hasta que termine la ronda eliminatoria”, explica el diestro. “Si pasamos a los playoffs, tenemos que hablar a ver qué nos dicen. Ya queda hablar con ellos a ver si me extienden el permiso”.
Barría viene de una temporada en las mayores en donde soltó un total de 32.1 entradas, pasó a 27 por las armas, su WHIP fue de 1.11 y su registro fue de 1-0, con efectividad de 3.62 en siete salidas, cinco de ellas como abridor.
En la presentación de este miércoles lanzó 5.0 entradas, espació cinco hits, le anotaron una, otorgó dos boletos y ponchó a tres.
“Tengo limitaciones en los pitcheos”, dice. “Puedo lanzar cinco innings o 85 lanzamientos. Si luego avanzamos más, podrían ser hasta siete capítulos”.
Para el canaleño, la última presentación fue la más difícil de todas.
“En los Toros (del Este) están Miguel Andújar y Gary Sánchez, a quienes enfrenté en Grandes Ligas en 2018. Yo los conozco. Es una alineación bastante fuerte, hice mi trabajo. Esa fue la clave”.
No le hace caso a los rumores de Grandes Ligas sobre cambios y cosas por el estilo.
“Mi agente me dijo que jugara aquí tranquilo”, explicó. “Yo puedo ayudar a Anaheim donde ellos me necesiten”.
Barría tiene una salida más. El problema es que Licey no tiene casi vida, está en terapia intensiva y quizá esa próxima salida no se realice. Esperemos.
Por Alfredo Villasmil Franceschi
