La temporada de los Yanquis de Nueva York finalizó en la jornada del martes después de la derrota que sufrieron ante su archirrival, los Medias Rojas de Boston. El mánager Aaron Boone cerró de la manera más difícil su temporada más compleja al frente del elenco de la Gran Manzana.
«Lo de hoy es complicado de digerir», confesó el timonel al ser derrotado 6 por 2 en el Fenway Park en el Juego del Comodín. «Hemos pasado por muchas cosas y tenemos muchas heridas».
Es la primera vez en sus cuatro años dirigiendo a los Mulos del Bronx que se despide de la contienda con apenas un solo compromiso disputado en los playoffs. Es el resumen de un año atípico para él en la cual fue la primera ocasión que no pudo ganar al menos 100 partidos en una ronda eliminatoria completa.
Los Bombarderos terminaron la primera mitad de la justa solo un poco por encima de .500 en su récord con 46 triunfos y 44 reveses. En la segunda parte enderezaron bastante el rumbo con 44 victorias en 74 cotejos, pero aún así necesitaron las 162 jornadas del calendario para avanzar al encuentro que disputaron este martes.
«No fue fácil», reflexionó el estratega. «Cuando tuvimos que jugar fuerte en los dos últimos meses y competir al más alto nivel, creo que lo logramos. Nos dimos la oportunidad de estar en este juego y me gustó la forma como competimos en estas últimas semanas».
El club con más títulos en Las Mayores tuvo que ganar 10 de sus últimos 14 partidos para poder disputar la siguiente instancia, pero fallaron en el inicio de la misma.
«Hemos sido afortunados de ir a la postemporada todos los años», agregó en su rueda de prensa de despedida en esta justa. «Pero no ha terminado como queremos».
«Ya hemos estado en esta posición antes», reflexionó el estratega. «Pero los muchachos están destrozados anímicamente».
TIEMPO DE ANÁLISIS
La derrota del martes de los Yanquis de Nueva York extiende su sequía sin títulos a doce años.
La gerencia encabezada por Brian Cashman tendrá muchas jornadas para reflexionar y tomar decisiones antes del próximo Spring Training, empezando por la continuidad de Aaron Boone al frente de la novena.
El infielder tiene claro que para acabar con la ausencia de Series Mundiales hay cosas que deben cambiar.
«Tenemos que mejorar», terció el piloto. «La liga ha cerrado filas contra nosotros porque ya no son solo los Medias Rojas nuestros rivales. Los Astros, los Rays, los Azulejos y algunos equipos de (las divisiones) Centro y Oeste que son cada vez mejores».
El futuro de la receptoría, las paradas cortas, la primera base y el jardín central son puntos a definir de cara la próxima contienda. El status del cuerpo de abridores y tal vez reforzar el bullpen también son tareas pendientes para los ejecutivos de la franquicia.
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«Estoy agradecido por competir con este grupo de muchachos», admitió Boone. «Porque este fue un año de retos».
«Ahora nos toca prepararnos en el offseason», concluyó. «Y tratar de mejorar”.
Por Marcos Grunfeld
