El líder en victorias de la Liga Nacional estaba anunciado para abrir el juego decisivo entre los Dodgers de Los Ángeles y los Gigantes de San Francisco. El mexicano Julio Urias había incluso conversado con los medios especializados como el pitcher para iniciar el quinto compromiso de la Serie Divisional de la Liga Nacional. Los esquivadores anunciaron a última hora que ya no será así.
El mánager Dave Roberts alistó su estrategia desde horas antes de que ambas novenas saltaran al terreno. El piloto decidió llamar a un derecho al montículo. Todo indica que buscará que su contraparte, Gabe Kapler, haga una alineación en función a eso para después traerle al zurdo azteca.
El relevista Corey Knebel será el encargado de comenzar el partido entre los archirrivales del viejo circuito que en este caso definirá al rival de los Bravos de Atlanta en la Serie de Campeonato.
«La razón de esta decisión es lo que sentimos que nos ofrecerá más ventaja para ganar este único juego», reflexionó el estratega, un par de horas antes de la voz de playball. «En mis planes estaba que Corey lanzara esta noche. Cuándo lanzará forma parte de la planificación».
El mandamás de los Gigantes, en respuesta, no ha dicho cuál será su alineación a una hora de comenzar el duelo.
La medida estaba tomada desde la noche del miércoles, a pesar de que el público general se enteró solo unas horas antes de que se diera inicio al cotejo.
«Los Gigantes de San Francisco han sido la mejor organización en sacar ventaja de los enfrentamientos individuales», explicó el estratega de los californianos. «Esto nos permite tener a un pitcher neutral, quien ha hecho un trabajo fabuloso y nos permitirá manejar esos duelos durante todo el compromiso».
UN EXPERIMENTO YA EJECUTADO
Corey Knebel ya actuó durante la contienda en calidad de opener. Lo hizo en tres ocasiones y permitió una carrera producto de cinco hits en 4.2 entradas. En ese lapso no toleró jonrones y no concedió boletos.
Una de esas salidas fue contra su rival de la noche del jueves a quienes le tiró dos entradas en blanco con dos ponches, el 3 de septiembre.
«Fue una decisión que hicimos en conjunto en toda la organización», reveló Roberts ante la prensa especializada. «Desde lo más alto, pero Knebel y Urias también participaron. Si ellos hubieran manifestado alguna incomodidad, jamás hubiéramos tomado esta decisión».
La determinación que tomó el club no significa que el mexicano no tendrá participación en el compromiso contra los Gigantes. Todo indica que simplemente lo hará en otro rol.
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«Él es el hombre que puede trabajar en diferentes situaciones y eso es el mejor cumplido para él», analizó el timonel. «Él tiene la flexibilidad de lanzar en diferentes situaciones y es parte de su madurez como jugador de las Grandes Ligas».
«Mi expectativa es que Julio lance esta noche y lance bastante», siguió. «Lo único que a él le importa es ganar el partido. Eso es lo que la gente va a recordar. Nadie va a recordar quién abrió, en mi opinión. Esa es la misión de todo el club y esto es con lo que nos sentimos más cómodos para lograr eso».
Por Marcos Grunfeld
una locura total, no le encuentro sentido, este beisbol moderno está acabando con todo