El grandeliga Wilfredo Tovar sentenció la venganza de los Leones del Caracas. El infielder encontró a Alfredo González, quien entró como corredor emergente por Jhonny Pereda, en la intermedia y dio un sencillo al jardín izquierdo para remolcarlo con la pizarra igualada a dos carreras en la parte baja de la novena entrada.
Los melenudos dejaron en el terreno a los Navegantes del Magallanes para imponerse 3 por 2 en el Estadio Universitario.
«Wilfredo Tovar es un caballo», celebró el mánager José Alguacil, según el periodista Guillermo Liñares. «Es un caballo de verdad. Es un tipo con ímpetu, que sabe lo que tiene que hacer desde el primer día. Nosotros sabíamos que no podíamos perder un juego más contra Magallanes, y lo sacamos»
El camarero sentenció una noche de tres imparables en cinco viajes al plato con una fletada y tres sencillos.
«Me concentré en buscar un lanzamiento del medio hacia afuera», festejó el segunda base. «Intenté ser agresivo y afortunadamente salieron las cosas».
El elenco de Wilfredo Romero vino dos veces de atrás aunque eso no fue suficiente.
RECUENTO DE CARRERAS
Los capitalinos anotaron primero en el segundo inning. El utility José Rondón fue golpeado y avanzó a tercera base por sencillo de Pereda. Después anotó con elevado de sacrificio de Romer Cuadrado.
Los eléctricos igualaron la pizarra en el quinto acto. El infielder Leonardo Regginato y el dominicano Alejandro De Aza se embasaron con boleto y sencillo, respectivamente. El brasileño pisó el plato con otro cohete de Carlos Pérez.
La respuesta de los locales no tardó mucho. En el sexto capítulo Alexander Palma y Aldrem Corredor iniciaron el ataque con sendos sencillos y avanzaron con sacrificio de Ronny Cedeño. Rondón rompió el empate con otro elevado de sacrificio.
Todo parecía definido para la causa del elenco de Alguacil. Un error de Ángel Aponte, en un batazo de Alberth Martínez, le permitió a Gabriel Noriega empujarlo con un sencillo al jardín izquierdo que empató el partido.
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Ese pecado de Aponte arruinó la gran salida del grandeliga Ronald Herrera que tiró seis entradas de una rayita, permitiendo dos boletos, cuatro hits y fusilando a dos rivales.
«Tuve una buena comunicación con mi catcher», reflexionó Herrera. «Es algo de suma importancia, eso me ha ayudado mucho y estamos en la misma página».
Por Marcos Grunfeld