La discreta temporada del grandeliga Willians Astudillo ha quedado definitivamente atrás. Que se cuiden los rivales de los Caribes de Anzoátegui.
Astudillo sacudió este sábado su segundo jonrón de la postemporada. Fue el único cuadrangular de la jornada en el Round Robin semifinal de la LVBP.
Pero aunque el toletero derecho tan solo ha sacado 5 pelotas del parque en toda la 2021-2022, contando eliminatoria y playoffs, sus otros registros son notables. Es, de hecho, uno de los bates más calientes de enero en el beisbol venezolano.
Astudillo sacudió 12 estacazos de vuelta completa en la justa 2018-2019, contando desde la fase regular hasta la final. Entonces fue una de las principales fuerzas ofensivas de la tribu, como ha sido siempre desde que se convirtió en titular de los orientales. Por eso extrañaba el bajón de esta oportunidad.
Ese bajón ya no es tal. El bombazo contra el nicaragüense Carlos Téller en el estadio José Pérez Colmenares de Maracay fue solo ua proclama más:
Astudillo empujó cinco carreras en la jornada, aunque no pudo evitar la derrota ante los Tigres de Aragua.
Sus promedios han crecido hasta un nivel de bullición.
Entre octubre y la víspera de Nochebuena ligó para .270/.352/.396 en 30 juegos, con 3 bambinazos y 13 remolques. No son malos registros, salvo en el apartado del poder, como clama su slugging.
DATO. Desde que es jugador de todos los días, Willians Astudillo nunca había conseguido en promedio tan pocos extrabases como en la pasada ronda regular.
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Después de la Navidad tiene .472/.487/.694, con 2 pelotas en órbita y 8 anotaciones llevadas a casa en 9 cotejos. Todo en el Round Robin.
Ha ido a batear 39 veces y todavía no lo ponchan. Lo dicho: ha vuelto a ser el Astudillo de siempre.
Por Ignacio Serrano
