Por Alfredo Villasmil Franceschi
Santo Domingo. Si alguien lo hizo bien detrás del plato fue Sandy León. El grandeliga de los Marlins de Miami dirigió de manera magistral el pitcheo colombiano. “Este fue un trabajo, más que todo, de los lanzadores”, soltó al preguntarle de cómo él había guiado a los serpentineros a lo largo de la Serie del Caribe.
Uno de los datos más relevantes del pitcheos colombiano fue que Colombia bateó .350 con corredores en posición anotadora en la Serie. También Colombia terminó con foja de 5-1 cuando anotó primero en el partido. Terminó con marca de 5-0 cuando llegó ganando a la séptima entrada. Es decir, el pitcheo funcionó correctamente.
En la ronda de equipos, León estuvo detrás del plato en cuatro de cinco compromisos. Dejó una línea ofensiva de .200/.429/.200 con cuatro boletos recibidos. Pero su filosofía fue siempre respetar al rival. “En el beisbol no hay equipos pequeños”, explicó. “Cuando juegas en equipo y haces las cosas bien cosas grandes van a pasar”.
José Mosquera lo dijo reiteradas veces. “Sandy es una garantía detrás del plato”. El zuliano, empero, no piensa así. “Todo el crédito para el pitcheo”, espeta. “Ellos confiaron en mí totalmente, en todo lo que yo podía hacer. Nos comunicamos bien. Ellos ejecutaron los envíos tanto contra Venezuela como contra República Dominicana. Son lineup que son muy peligrosos y los que ellos hicieron es bastante especial”.
Antes de comenzar la serie, nadie pensó que Caimanes de Barranquilla, equipo representativo de la liga colombiana, invitado, aún no miembro pleno del certamen, iba a vencer a los demoledores Gigantes del Cibao, equipo especializado en demoler pitchers. La fe mueve montañas. Así lo dijo él.
“Creo que Dios puede hacer muchas cosas especiales y así pasó”, destacó con su acento colombiano. “Es que Colombia me ha tratado muy bien. Es mi segunda casa”.
Después de hablar tanto se fue a celebrar, a levantar la Copa. Total, ya lo había hecho todo. Se coronó campeón del Caribe y demostró porqué es uno de los mejores directores de orquesta de la región.
Alfredo Villasmil Franceschi