Por Marcos Grunfeld
Los 30 dueños de la MLB se reunirán en pleno en la ciudad de Orlando, en Florida, entre martes y jueves. Toda la expectativa para ese cónclave es que se definan los pasos a seguir con respecto al conflicto vigente con el Sindicato de Peloteros.
La información es de un reportaje del periodista Jon Heyman. El comunicador social explicó que los jugadores están a la expectativa de recibir una nueva contrapropuesta en los días posteriores a ese cónclave.
La MLB todavía no ha dado señales de que eso vaya a ocurrir. El ente que rige al mejor béisbol del mundo ha guardado silencio después de que la Asociación de Peloteros de la gran carpa rechazara la participación de un mediador para resolver el cierre patronal.
«Nosotros no creemos que un conciliador vaya a acelerar el proceso», le dijo el relevista Andrew Miller al periodista de ESPN Jesse Rogers. «La historia nos dice que no ha sido favorable llegar a un pacto bajo esa figura. Nosotros estamos aquí con nuestras propuestas y el deseo de sentarnos en la mesa. La liga se rehusado a contraofertar y es la que ha trancado el proceso al no mostrar deseo para reunirse nuevamente».
El lunes también surgió la noticia de que el Secretario del Trabajo de los Estados Unidos, Marty Walsh, se ofreció a contribuir a destrabar el conflicto entre las Grandes Ligas y la MLBPA.
«He hablado con las dos partes sobre el proceso actual de discusión del contrato colectivo», escribió en Twitter. «Y he animado a los dos a continuar conversando. Como cualquier otra negociación en cualquier industria, estoy aquí listo para ayudar a facilitar las conversaciones productivas que resulten en el mejor resultado posible para los trabajadores y sus patronos».
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Ni el sindicato ni la MLB se han referido al ofrecimiento de Walsh.
Pero mientras todo esto ocurre, los equipos de Las Grandes Ligas tienen previsto que la semana que viene empiecen a llegar los receptores y catchers a los entrenamientos primaverales. Ese escenario es cada vez menos viable al igual que el comienzo de los partidos del Spring Training arranquen a tiempo.
(Marcos Grunfeld)