Por Marcos Grunfeld
El plazo que impusieron los dueños de las Grandes Ligas para firmar un nuevo contrato laboral con el Sindicato de Peloteros se cumplió. La MLB procedió a ejecutar su promesa y si eso no ocurría para el 1º de marzo a las 6:00 pm, los primeros juegos de la ronda eliminatoria iban a ser aplazados.
“El calendario no nos permite jugar las dos primeras series de la temporada regular», anunció el comisionado Rob Manfred en una rueda de prensa. «Esos juegos serán cancelados. Estamos preparados para seguir las negociaciones y le hemos informado a la MLBPA que no es posible ningún acuerdo al menos hasta el jueves».
Las dos partes cumplieron un calendario de nueve días seguidos de negociaciones en el Estadio Roger Dean, hogar primaveral de los Cardenales de San Luis. En la mayoría de las sesiones hubo pesimismo en la prensa especializada hasta la madrugada del martes. Los reporteros presentes en el parque ubicado en Júpiter empezaron a notar que hubo acercamientos en puntos álgidos que hacían pensar que era posible un acuerdo antes del límite impuesto por los dueños de los 30 clubes.
“Lo difícil de este proceso es que requieren las dos partes para lograr un pacto», agregó el ejecutivo. «Estoy decepcionado que no lo logramos, pero estoy comprometido de hacer todo lo posible por lograr uno. Necesitamos reagrupamos y ver cómo proseguir».
El directivo indicó que no hay una nueva reunión programada para los próximos días. Los ejecutivos y los jugadores se marcharán de Florida en el transcurso del miércoles a la espera de un nuevo cónclave.
“Las negociaciones están trancadas ahora», añadió Manfred. «Pero eso es diferente a utilizar el término legal de impasse y no haré eso”.
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El máximo representante de los dueños hizo un largo repaso sobre los acuerdos alcanzados hasta ahora y las propuestas al gremio de peloteros. Entre las discusiones se confirmó el aumento del salario mínimo a 700 mil dólares y la propuesta de un fondo de bonificaciones de 30 millones de dólares para los novatos. También la aprobación de una lotería para el draft colegial y la eliminación de la oferta calificada.
«Quiero dejar en claro que la falta de un acuerdo no ha sido por la falta de esfuerzo de ninguna de las dos partes», concluyó el comisionado. «Todos trabajamos duro y agradezco el esfuerzo, pero hemos fallado en lograr un nuevo contrato. Lo más desafortunado es que el acuerdo que ofrecimos a los peloteros tiene muchos beneficios».
(Marcos Grunfeld)
