Por Johnny Villarroel
Germán Marquez tuvo una sólida salida de calidad frente a los poderosos Dodgers de Los Ángeles en una actuación que recibió elogios por parte del manager de los Rockies de Colorado Bud Black en choque realizado en el difícil Coors Field.
Pero no solo se trató de una buena apertura. Porque en su salida ante el equipo con la nómina más cara del beisbol, el as de Venezuela enseñó una nueva arma que, espera, puede llevarle a otro nivel.
El serpentinero derecho Márquez sigue mostrando su dominio en su casa del Coors Field después de la campaña 2021, donde finalizó con récord de 8 victorias y 3 derrotas, con una efectividad de 3.67 y WHIP de 1.175.
Es un dato auspicioso, por lo hostil que resulta su casa a los lanzadores.
En la carretera Marquez no pudo brillar tal y como lo esperaban los Rockies. con 4 triunfos y 8 reveses para finalizar con un promedio de 5.38 y WHIP de 1.403.
«Necesito probar el cambio un poco más. Esta vez ha estado bien, voy a seguir tirándolo», señaló el lanzador que en esta apertura hizo 74 envíos, 51 de ellos fueron strikes y dominó, entre otros, los poderosos bates de Mookie Betts y Freddie Freeman.
En su trabajo de siete entradas Márquez permitió una carrera limpia, le conectaron tres imparables y ponchó a cinco bateadores. «Permanecer en Denver durante el invierno ayudó con la transición de vuelta a la altitud para ese lanzamiento», dijo Black una vez finalizado el compromiso.
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(Johnny Villarroel)