Por Marcos Grunfeld
El segunda base Gleyber Torres era tan solo un niño de siete años cuando Miguel Cabrera comenzó a labrar su legendario camino por las Grandes Ligas. En la medida que la historia del aragüeño iba construyéndose, éste iba convirtiéndose en el ídolo del hoy camarero de los Yanquis de Nueva York. Casi dos década después, aquel infante que soñaba seguir los pasos del futuro miembro del Salón de la Fama recibe un premio especial.
El caraqueño colgó en sus redes sociales que el slugger de los Tigres de Detroit le regaló una camisa de su propiedad. «Miggy» le firmó la casaca y le compartió todos sus logros desde los dos premios al Jugador Más Valioso de Las Mayores hasta su más reciente hazaña que fueron los 3.000 imparables.
«Él siempre ha sido un modelo a seguir», le comentó el infielder a MLB.com en 2016, antes de convertirse en grandeliga. «Como rutina antes de cada juego veo sus videos. Me fijo mucho en cómo él hace para batear tanto hacia la banda contraria y además hacerlo con poder. Eso es lo que buscamos y yo lo he seguido a él desde que era niño para tratar de recalcar eso».
Cabrera escribió un apretadísimo currículo en el número 24. Y esas frases realzan una candidatura indiscutible para el Salón de la Fama. Dice:
- «Para Gleyber.
- Club de los 3.000 hits.
- Club de los 500 jonrones.
- Triple Corona 2012.
- MVP Liga Americana 2012 y 2013.
- Miguel Cabrera».
Debe ser un momento especial para Torres que toda su vida ha admirado al ganador de la Triple Corona.
Durante el Spring Training pasado, los dos peloteros se retrataron en una foto que se volvió viral en su momento por las redes. En aquella imagen, Torres luce claramente feliz de compartir con el mejor pelotero de Venezuela.
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(Marcos Grunfeld)