Por Marcos Grunfeld
El poderoso slugger Diego Castillo sacudió su 10º bambinazo de la temporada y fue autor de la mayoría de las carreras que los Piratas de Pittsburgh fabricaron en la jornada del viernes. Para su mala fortuna eso no bastó y los Cerveceros de Milwaukee se impusieron en la jornada del viernes con pizarra de 4 carreras por 3.
El infielder fue el único de sus compañeros que prácticamente le pudo hacer daño a Aaron Ashley, el abridor de los lupulosos, quien permitió tres hits y dos carreras, ambas producidas por el venezolano.
«Su recta es realmente buen», admitió el barquisimetano ante el Post Gazette, luego de terminado el compromiso. «Estaba moviéndose realmente bien. Me dije a mi mismo que no iba a buscar la recta porque no iba a obtener el resultado que quería. Entonces fui por otro lanzamiento y me lo tiró. Solo tuve que ponerle el swing y ya».
El tablazo recorrió 395 pies, según el cálculo de Statcast y fue por todo el jardín izquierdo.
Ese bambinazo fue el segundo cuadrangular de Diego Castillo en los últimos tres juegos para el larense, quien se ha embasado en cinco de sus últimas 11 apariciones al plato, con trío de incogibles y par de boletos.
Eso ocurrió después de haber dado solo dos imparables en 7 juegos entre el 29 de junio y el 6 de julio.
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DATO. Diego Castillo conectó el viernes su quinto jonrón en sus últimos 8 juegos en la carrera y el séptimo en sus últimos 18 partidos, según el Post Gazette. Solo Kyle Schwarber tiene más en ese lapso en la Liga Nacional.
(Marcos Grunfeld)
