Por Ignacio Serrano
El venezolano Miguel Cabrera volvió a moverse en los conteos de todos los tiempos en las Grandes Ligas, este domingo, a pesar de no golpear un hit y alargar un sufrido slump.
Cabrera tomó una base por bolas en tres apariciones legales que sumó ante los Mellizos de Minnesota. Y ese boleto, el número 1.217 de su carrera en la MLB, le permitió rebasar al gran Dave Winfield, miembro del Salón de la Fama.
El nativo de Maracay se fue de 2-0 en el duelo. Sus Tigres de Detroit cayeron 9 carreras por 1 y debido a eso no le dieron un turno más en el home. El manager A.J. Hinch prefirió no arriesgar y se lo llevó en un doble cambio, cuando subió a la lomita a Kody Clemens, el infielder hijo del legendario Roger Clemens.
EN PLENA SEQUÍA
La transferencia no cortó la profunda sequía que sufre Cabrera desde el 8 de julio, cuando sus promedios comenzaron a caer.
El aragüeño ha dado 5 hits en 41 turnos, contando la cosecha dominical. Batea para .122 en ese lapso.
El slump ha echado por tierra una parte de lo conseguido antes de esa fecha. Porque Cabrera causó admiración al meterse entre los 8 mejores bateadores en average de la Liga Americana, con .308, antes de perder 26 puntos durante este bajón.
Al menos eso no impide que siga caminando entre leyendas. Ahora ocupa en solitario el lugar 58 de todos los tiempos entre quienes han caminado gratis más veces en las Grandes Ligas.
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(Ignacio Serrano)
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