Por Roberth Pérez
Los Cascabeles de Arizona designaron para asignación este viernes a Ali Sánchez. Es la cuarta vez en el año que el venezolano pasa por este proceso.
En junio, Sánchez fue puesto en asignación por los Cardenales de San Luis y fue reclamado por los Tigres de Detroit. Los felinos hicieron lo mismo en octubre y fue tomado por los Piratas de Pittsburgh.
En diciembre, pasó por waivers otra vez, llegando a los Cascabeles de Arizona, equipo que lo colocó en asignación para abrir espacio en el roster a su compatriota Gabriel Moreno, quien llegó vía cambio este mismo viernes.
Parece una travesía sin fin para Sánchez, quien deberá ser cambiado o pasar por waivers en un lapso de siete días.
Teniendo en cuenta que cumplirá 26 años en enero, Sánchez todavía es joven y tiene herramientas atractivas y útiles para cualquier organización.
Posee una excelente defensiva, con una capacidad extraordinaria para capturar a los robadores de bases (44 por ciento de corredores puestos out de por vida) y es un bateador promedio, con disciplina en el plato (promedios de .262/323/343 en ocho campañas en las Menores).
Menos mal ya va a terminar el 2022, que ha sido un año turbulento para el venezolano. Sánchez tendrá que esperar unos días a ver cual es el próximo paso de su carrera.
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(Roberth Pérez)
Foto: @Cardinals
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