Por César Sequera Ramos
Para muchos debería imposible dejar buenas impresiones cuando tu promedio de batea apenas supera los .100. Es más, para la gran mayoría de los jugadores tener un average como ese sería un motivo de preocupación, especialmente en el Spring Training. Pero, cuando el protagonista es Francisco Álvarez, sí es posible.
Especialmente porque las estadísticas totales son lo que menos importa en este momento a Glenn Sherlock, coach de receptores dentro de los Mets de Nueva York. Lo que el instructor quiere ver son las herramientas del jugador y cómo evolucionan las mismas luego de algunos consejos, algo que el venezolano ejecuta a la perfección.
“Es un chico emocionante de ver porque hace muchas cosas bien detrás del plato”, dijo el experimentado coach al New York Post cuando le preguntaron sobre Álvarez. “Es tan explosivo ofensiva y defensivamente, eso es lo que veo”.
Estadísticamente no se ha visto esa potencia durante el actual Spring Training. El joven prospecto solo tiene dos hits durante los 21 turnos que ha consumido en la pretemporada, sin cuadrangulares y una carrera impulsada. Un promedio de .143 que no dice cuán bueno es.
Dentro de los Mets creen que hay un poco de mala fortuna. Por ejemplo, en más de una ocasión golpeó la pelota a más de 100 millas por hora, aunque la mayoría de esas conexiones fueron atrapadas por defensores. Quizás por eso no hay preocupación alguna. “Estará bien. Tiene suficientes herramientas para superar cualquier momento que atraviese”, aseguró Sherlock.
MÁS QUE OFENSIVA
La carta de presentación de Francisco Álvarez es y será la ofensiva. Sus virtudes como toleteros son tan bien conceptuadas que nadie duda de que se convertirá en una estrella de las Grandes Ligas, pero no son pocos los que dudan de sus habilidades como receptor. Glenn Sherlock no es uno de ellos.
Luego de trabajar por varias semanas con la promesa, el coach piensa que el venezolano puede ser un gran catcher. De esos que llaman un buen juego y que puede controlar a los corredores rivales sin problemas con tiros que ya superan las 80 millas por hora de acuerdo a sistema de mediciones.
“Es un brazo plus. Realmente puede lanzar. La pelota sale de la mano con mucha velocidad”, expresó el técnico. “Todo lo que hace es explosivo. Gira el bate con fuerza. Lanza fuerte”.
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UN DATO. Detrás del plato Álvarez ha conseguido buenos números en la pretemporada. Ya cuenta con 17 episodios en los que no ha cometido errores y hasta cuenta con una asistencia, por lo que empieza a demostrarse que su trabajo da resultados y que su futuro detrás del plato es prometedor.
(César Sequera Ramos)
Foto: @Mets
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