Se llama Roberto Clemente Álvarez, comparte segundo nombre y primer apellido con su padre, leyenda de la LVBP que también le dio las primeras enseñanzas detrás del plato. Y a partir del domingo, ya puede celebrarse como un jonronero en el circuito, luego de lo que hizo en La Guaira.
A los 25 años de edad, y apenas en su quinto juego en la pelota rentada venezolana de invierno, el hijo del ex receptor sacudió un jonrón de dos carreras que marcó la diferencia para el triunfo de los Tiburones contra los Bravos de Margarita, en Macuto.
«Estaba buscando una recta, pero me lanzó una curva y se quedó allí en la zona», relató Roberto a Efraín Zavarce para IVC Networks, sobre el turno decisivo de la noche ante el derecho Mark Simon. «Siempre estoy buscando recta, aunque si el pitcheo está ahí voy para allá de forma agresiva».
Álvarez, además, sumó un sencillo para irse de 3-2 y registrar también su primer desafío multihits. De hecho, antes de la jornada, apenas había disparado un par de imparables en ocho turnos previos.
PRIMEROS PASOS EN LA GUAIRA
Ahora, Roberto Álvarez está a 13 vuelacercas de alcanzar a su papá. Algo que se toma con igual carga de optimismo y jocosidad.
«Claro que puedo alcanzarlo», aseguró. «En 19 años él hizo eso, y ahora es que a mí me queda carrera».
El primer paso, Álvarez Jr. ya lo dio en La Guaira, club al que llegó en el receso de la zafra 2023-2024, proveniente de los Tigres de Aragua, en el cambio que involucró al infielder grandeliga Yonny Hernández, hoy en los Cardenales de Lara.
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Roberto Álvarez no ha sido un jonronero en su carrera de Ligas Menores (de 2016 a 2023). Apenas tiene siete vuelacercas en 1.233 turnos, lo que es igual a un cuadrangular cada 176 veces al bate. Pero logró el primero en la LVBP en su duodécimo turno.
Foto: Edison Suárez (Prensa Tiburones BBC)