En el estrado estaba Renato Núñez, con su premio del Productor del Año y el Víctor Davalillo al Jugador Más Valioso de la temporada. Pero unos escalones más abajo se encontraban los verdaderos ganadores: su familia.
El slugger de los Navegantes del Magallanes estuvo acompañado por sus padres, su hermana y una tía convertida en talismán: el mismo día que empató el récord de 21 jonrones, ella estaba en el estadio, celebrando su cumpleaños.
«Siempre deseé tener una temporada así», dijo Renato Núñez a El Emergente, tras recibir los galardones de Los Grandes, en Valencia. «No solo lo quería por lo individual, sino también para avanzar a una postemporada con el Magallanes».
El valenciano adoptó al parque José Bernardo Pérez como su hogar desde julio, cuando regresó a Venezuela tras lesionarse en México. Y, desde entonces, trabajó desde las sombras para construir una campaña inédita.
LOS REGISTROS DE RENATO NÚÑEZ
El toletero derecho marcó el tono de su contienda desde la primera jornada, cuando se convirtió en el primer venezolano del Buque en conectar dos o más vuelacercas en el Día Inaugural. Y no se detuvo, hasta ser el primer jugador en la historia de la LVBP que combinó al menos 20 cuadrangulares y 60 carreras empujadas.
«Uno siempre tiene la fe de que las cosas te van a salir bien», afirmó Renato Núñez. «Por eso es que nos preparamos tanto antes y durante la temporada».
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Sólo un voto separó a Renato Núñez de ser el MVP unánime de la temporada. Sin embargo, se convirtió en el primer venezolano del Magallanes que alza el premio, uniéndose al estadounidense Delmon Young (en la 2018-2019) como los únicos en ganarlo con la franquicia, luego de que Jesús Cacao Valdez perdiera el suyo (en la 2017-2018) por dar positivo a una prueba antidoping.
Foto: Francis Grahovac