Los Nacionales de Washington necesitan consistencia ofensiva de su catcher titular, y Keibert Ruiz coimienza a ofrecérsela justo cuando se acerca el final del Spring Training.
Este sábado, el receptor venezolano conectó un hit en cuatro turnos, con una anotada y una empujada, y extendió a cuatro su racha de juegos consecutivos conectando al menos un imparable. Durante ese lapso, su promedio ofensivo pasó de .250 a .279.
Keibert Ruiz suma 12 hits en 43 turnos esta primavera, incluyendo tres jonrones, 11 remolcadas y dos bases robadas. Su OPS se ubica en .801, una señal alentadora para un jugador que en 2024 apenas bateó para .229, con 13 jonrones y 57 impulsadas.
UN ROL CLAVE EN WASHINGTON
“Keibert está viendo mejor los pitcheos y se nota en la calidad de sus turnos», declaró el manager Davey Martinez, citado por medios capitalinos esta semana. «Ha trabajado duro para afinar su enfoque y hacer ajustes desde ambos lados del plato».
A sus 25 años, Ruiz carga con la responsabilidad de liderar desde la receptoría a un equipo que busca reconstruirse.
Su contrato de largo plazo con los Nacionales lo consolida como una pieza central del proyecto de los Nacionales.
Ahora, con su ofensiva calentando motores, el criollo busca dejar atrás un 2024 decepcionante y volver a demostrar por qué fue una de las principales adquisiciones del cambio que envió a Max Scherzer a los Dodgers.
LEE TAMBIÉN: Ildemaro Vargas le mete presión a Arizona: jornada de tres hits y pide puesto en el roster
La confianza del cuerpo técnico sigue firme: «Él es parte de nuestro núcleo», reafirmó Martinez. «Sabemos que tiene las herramientas para ser un bateador productivo y un líder detrás del plato». Con solo una semana para el Día Inaugural, Keibert Ruiz apunta a comenzar encendido, afianzando su lugar como uno de los pilares de los Nacionales.
FOTO: @Nationals