Luis Arráez sigue haciendo lo que mejor sabe: batear. Este domingo, el infielder volvió a sumar imparable al irse de 2-1 con una anotada.
El yaracuyano deja su línea ofensiva en .400/.400/.400 en el Spring Training. esar de su aporte, los Padres de San Diego cayeron 10-4 ante los Reales de Kansas City.
«Siempre trato de hacer mi trabajo y ayudar al equipo», ha comentado en varias oportunidades Arráez, quien se mantiene enfocado en aprovechar cada turno al máximo y ajustar su swing para mantenerse como uno de los bates más consistentes en las Grandes Ligas.
CÓMODO EN EL PRIMER TURNO
Arráez suma ya hits en tres de los cinco juegos en los que ha tomado acción en la Liga del Cactus, en Arizona.
Su contacto impecable y disciplina en el plato le dan a San Diego una seguridad ofensiva para iniciar los ataques. «Poner la bola en juego es algo que vamos a seguir haciendo este año», dijo Mike Shildt, manager delvenezolano. «Él es quien nos marca el paso», acotó el timonel.
En este encuentro, Arráez alineó como primer bate y primera base, un rol en el que podría encajar bien para los Padres, considerando su habilidad para embasarse y mover la ofensiva.
La capacidad del venezolano para embasarse y generar carreras sigue siendo clave. En lo que va del Spring Training, ya suma dos carreras impulsadas y una anotada.
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Con un inicio sólido en la pretemporada, Arráez continúa demostrando por qué es uno de los bateadores más difíciles de dominar en el beisbol. Los Padres saben que su aporte será clave en la temporada, y él sigue enviando señales de que está listo para asumir el reto.
FOTO: @PADRES
Arráez con sus hits! Y más nada.