Oswaldo Cabrera conectó dos hits este domingo y en medio del desorden defensivo de los Yanquis pone a hablar a todo el mundo sobre qué puede suceder en la esquina caliene de los Yanquis. Se fue de 4-2, con una anotada.
El utility de Nueva York batea para .375 tras los tres primeros encuentros del año. Ha dado de hit en dos de ellos y dejó su OPS inicial en .750.
El manager Aaron Boone dijo que lo que falta a Oswaldo Cabrera es «controlar mejor la zona de strike» para que gane más turnos. «Si lo logra, puede ser muy productivo para nosotros, sobre todo del séptimo puesto de la alineación hacia abajo».
Cabrera entró como emergente el sábado y falló, pero ha aprovechado cada oportunidad. Su defensa sigue siendo confiable, y el bate empieza a mostrar consistencia.
La antesala es hoy una crisis para los Yanquis. Pablo Reyes cometió dos errores el sábado y Oswald Peraza no ha convencido con el madero. Cabrera, al menos, no falla con el guante.
Boone reconoce que Cabrera «es un buen pelotero» y valora su versatilidad. Su rol como suplente premium podría mutar si sigue sumando con el bate y la defensa.
Cabrera es ambidiestro, pero ha sido menos efectivo ante zurdos. Aun así, su entrega y enfoque diario lo mantienen en el radar del cuerpo técnico.
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Oswaldo Cabrera acumula 12 jonrones y 55 empujadas en 191 juegos en MLB. También ha jugado en al menos seis posiciones defensivas distintas desde su debut. Este domingo ayudó a los Yanquis a mantenerse en juego, en un lineup con estrellas, pero también con vacíos. Su producción puede llenarlos si mantiene el ritmo.
FOTO: @ocabrera13 (Instagram)
