Los Cardenales dieron la bienvenida a su pretemporada al bigleaguer Kelvim Escobar, quien así dio el primer paso en el camino de regreso a la actividad, tras varios años tratando de superar lesiones e intervenciones quirúrgicas en el hombro derecho. En su llegada al diamante en Barquisimeto, Escobar trabajó básicamente con ejercicios de acondicionamiento físico. Es la primera vez en dos años que el varguense intenta un retorno con los pájaros rojos. La última casi culmina bien, e incluso le valió un contrato de un año con los Mets de Nueva York, pero Lara no clasificó, no pudo lanzar aquí y posteriormente se resintió en el spring training.
Los pájaros rojos también recibieron a siete nuevos jugadores este miércoles: los lanzadores Ángel Raga, Alesson Escalante, Yensi Magallanes y Pablo López, el infielder Edilio Colina y los receptores Luis Hurtado y Rainis Silva. Con ellos, ya hay 67 jugadores vestidos de rojo en la pretemporada crepuscular.
Nelson Prada también se sumó a las prácticas y de inmediato comenzó sus labores como coach de bateo.
Los serpentineros Lino Urdaneta, Johnny Montoya y Edgar Pineda subieron al morrito, para lanzar una práctica de bateo en vivo este miércoles, la segunda para ellos en lo que va de entrenamientos.
La gerencia continúa buscando importados para la segunda avanzada. Hasta ahora hay tres en ese grupo: los pitchers Brian Sweeney, Scott Patterson y Deryk Hooker, el último de los 11 refuerzos ya contratados que ha firmado con los Cardenales.
La nueva madrina de los pájaros rojos se llama Ninoska Vásquez y fue elegida la noche del martes.
