Blancas. Inesperado novato treintañero, ya comenzó a disfrutar la diferencia entre las menores y
“Todo es diferente”, confesó
Yohán Pino
desembarcó el miércoles en Minnesota y de inmediato notó la diferencia entre sus 10
años en las menores y su nuevo estatus grandeliga.
diferente”, sonrió, al otro lado del hilo telefónico.
hotel. La vista de las ciudades gemelas, Minneapolis y St. Paul, con su
espectacular downtown. El botones
esperando en la puerta. El lobby cinco estrellas.
increíble”, confesó el recién ascendido lanzador. “Es otro ambiente. Desde que
llegué al hotel se siente la diferencia. De verdad. Esto es completamente
diferente a las menores”.
para ocupar un lugar en la rotación de los Mellizos a partir de este jueves. Tomará el puesto de Samuel Deduno, quien fue enviado al bullpen, gracias a una marca de 9-1, con
1.92 de efectividad, 0.93 de WHIP y esa buena relación de 61 ponches y 16 boletos
en 61 innings.
tiempo luchando para lograr la oportunidad de jugar en las grandes ligas”,
subrayó. “Estoy en Minnesota y todavía no lo creo. Todo pelotero lucha por esto.
Por eso no puedo creerlo. Aunque tarde, me llegó la hora de la dicha”.
venezolanos, incluyéndole, han sido subidos por primera vez a la gran carpa
después de cumplir la treintena. Él tiene 30 años y 175 días de nacido. Es el
octavo más “viejo” en esa lista, que encabeza Clemente Álvarez con 32,124.
quise”, abundó el derecho. “A veces uno se desilusiona, pero nunca dejé de
creer. Me siento contento y orgulloso”.
Medias Blancas se opondrán al nativo de Turmero en el espacioso Target Field.
avión con un claro consejo de Gene Glynn, su manager en triple A, y Marty
Mason, su instructor de pitcheo: “Que no cambie mi plan de juego, que no cambie
nada. Sólo debo mantener mi confianza”.
qué recuerdos guardará, pero preservará más que buenas memorias. Es un sueño
cumplido.
llegar”, apuntó. “Uno tiene que valorar todo y siempre trabajar. Nunca es
tarde. Lo que uno se propone, lo puede lograr”.
figura de los Tigres durante una década y ayudó decisivamente a construir la ya
extinta dinastía rayada, mientras mantenía la esperanza de disfrutar la llegada
de un día como hoy.
Pasaron 10 temporadas sin el gusto de ser llamado a las
grandes ligas. Por eso, ahora está dispuesto a pelear su permanencia.
“Siempre
dije que el día que me subieran sólo podría bajarme Diosito. Y aquí estoy”.
En
la pelota criolla aprendió a pasar del bullpen a la rotación, y viceversa.
“La
liga venezolana me ha ayudado mucho”, resaltó. “Por eso, siempre salgo a hacer
mi trabajo mientras me den la oportunidad. Y se lo digo al manager”.
Desde ya
anuncia que no se perderá la campaña 2014-2015.
“Siempre he sido seguidor de los
Tigres de Aragua. Por supuesto que allí estaré”.
IS
Publicado en El Nacional, el jueves 19 de junio de 2014.