Wilson Ramos llegó a 14 juegos seguidos dando imparables, con el doble que conectó la noche del lunes, su único imparable en cinco viajes, suficiente para mantener su ritmo e igualar el tope personal en su carrera, impuesto la temporada pasada.
El tablazo fue un tubey barre bases, así que tuvo valor especial. Así, el carabobeño ayudó a los Nacionales a derrotar a los D’backs y conservó su average largamente por sobre los .300 puntos.
La seguidilla es también la más larga este año en las Grandes Ligas.
Ramos tiene .400 de average durante su racha, con 8 remolques. Su línea completa es de .400/.431/.473.
El 22 de abril, antes de comenzar su buen momento, el carabobeño bateaba para .229, casi 100 puntos menos que hoy. Amaneció con .320 este martes.
Ignacio Serrano