El árbitro venezolano esperará por una nueva oportunidad en las mayores, después de hacer su estreno
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| Torres (izquierda) fue el chief umpire el domingo, con Carlos Carrasco en la lomita |
El umpire Carlos Torres se despidió de Cincinnati y regresó este lunes a su cuarteta original en triple A, luego de vivir su primera experiencia en las Grandes Ligas, arbitrando durante tres días en sustitución de Mark Ripperger, quien disfrutó de un permiso especial para ausentarse de la serie entre Indios y Rojos.
Torres se convirtió el viernes en el segundo venezolano con autoridad para dictar sentencias en las mayores, emulando a su amigo y mentor Manuel González, su compañero en la LVBP.
El barquisimetano hizo la rotación durante el fin de semana. Gracias a eso, estuvo en la primera base el sábado y pudo ser el chief umpire el domingo, con su paisano Carlos Carrasco en el montículo como abridor de los indígenas.
Ambos se conocen desde los tiempos en que Torres empezaba a arbitrar los fines de semana en el estado Lara y Carrasco era pitcher en Criollitos, la corporación por la que pasaron ambos en ruta a la gran carpa.
No hay una fecha precisa para el retorno del hombre de azul, «pero esperemos que sea pronto», dijo.
Los umpires como él, dos en total, tienen número y lugar en el roster de la MLB, pero deben esperar en triple A que nuevamente ocurra un imprevisto, para ser subidos como sustitutos. De su rendimiento depende que eventualmente puedan quedarse a tiempo completo arriba.
«Voy a arbitrar en Venezuela», avisó Torres, uno de los más reputados jueces en la LVBP. «No podré hacerlo en octubre, porque apenas estaré llegando al país. Pero en noviembre sí voy a estar».
González también se mantuvo en la pelota invernal durante sus primeras campañas en las Grandes Ligas, pero finalmente se ausentó por recomendación de sus jefes en el norte y no participó en la zafra 2014-2015.
Ignacio Serrano
Publicado en El-Nacional.com, el lunes 20 de julio de 2015.
