El Emergente
Por Ignacio Serrano
Ronald Torreyes llegó a las Grandes Ligas con retraso. En
realidad, ha debido estrenarse el año pasado, alrededor de septiembre.
Quizás fuera esa pérdida de impulso que experimentó en la
recta final de 2014, ocurrida justo cuando los equipos sacan cuentas y se
preparan para definir la lista de los prospectos que serán llamados para su
experiencia inicial, el primero de septiembre.
recta final de 2014, ocurrida justo cuando los equipos sacan cuentas y se
preparan para definir la lista de los prospectos que serán llamados para su
experiencia inicial, el primero de septiembre.
Tal vez fuera porque aquellos Astros, su organización en ese
entonces, estaban fuera de combate y nada ganaban probando a un ligamenorista
más. Quién sabe qué pasó.
entonces, estaban fuera de combate y nada ganaban probando a un ligamenorista
más. Quién sabe qué pasó.
Torreyes finalmente tuvo su primera gran alegría en las
mayores este domingo. Fue llamado por los Dodgers y disputó su primer
encuentro. Dio un hit, que además fue un doble, y anotó su nombre en el listado
de bigleagers de Venezuela.
mayores este domingo. Fue llamado por los Dodgers y disputó su primer
encuentro. Dio un hit, que además fue un doble, y anotó su nombre en el listado
de bigleagers de Venezuela.
¿Ha habido otro prospecto del patio con tan rocambolesco
recorrido?
recorrido?
Porque este todavia joven infielder, que acaba de cumplir
los 23 años de edad, pasó de lo más alto a lo más bajo, todo en cosa de pocos
meses, y perdió su estatus de figura fija, de novicio con gran futuro, para
convertirse poco menos que en un paria, camino finalmente a su estreno en la
MLB.
los 23 años de edad, pasó de lo más alto a lo más bajo, todo en cosa de pocos
meses, y perdió su estatus de figura fija, de novicio con gran futuro, para
convertirse poco menos que en un paria, camino finalmente a su estreno en la
MLB.
Habrá que sacar la cuenta de cuantos venezolanos pasaron por
cinco organizaciones en la gran carpa, antes de finalmente conseguir la ansiada
meta de tomarse arriba su primer café.
cinco organizaciones en la gran carpa, antes de finalmente conseguir la ansiada
meta de tomarse arriba su primer café.
Torreyes, que en la LVBP pertenece a los Tigres de Aragua,
aunque nunca ha debutado (otra rareza en su hoja de servicios), saltó al
profesional a los 16 años de edad, como uno de los infielders más promocionados
en la generación del 2 de julio de 2009.
aunque nunca ha debutado (otra rareza en su hoja de servicios), saltó al
profesional a los 16 años de edad, como uno de los infielders más promocionados
en la generación del 2 de julio de 2009.
Firmó con los Rojos. Shortstop de vocación ofensiva, aunque
con proyección de terminar como defensor de la segunda base, por sus
características. Eso decían los reportes y los analistas. Eso creyeron los
Cachorros cuando lo adquirieron, tres temporadas después.
con proyección de terminar como defensor de la segunda base, por sus
características. Eso decían los reportes y los analistas. Eso creyeron los
Cachorros cuando lo adquirieron, tres temporadas después.
En 2013 fue cambiado nuevamente. Pasó a Houston, sin dejar
de batear. Estuvo casi todo 2014 sobre los .300, repartiendo batazos en triple
A y comprando boletos para un ascenso que no se produjo. Cerró con .298 y .721
de OPS.
de batear. Estuvo casi todo 2014 sobre los .300, repartiendo batazos en triple
A y comprando boletos para un ascenso que no se produjo. Cerró con .298 y .721
de OPS.
Puede que fuera su baja proyección de extrabases y la
sobrepoblación de buenos infielders en una divisa que hoy busca el modo de
hallar turnos al bate para Luis Valbuena y Jed Lowrie. O quizás fuera el
natural devenir de las cosas: los Astros necesitaron un cupo en el roster de 40,
dispusieron del de Torreyes y otros elencos se interesaron.
sobrepoblación de buenos infielders en una divisa que hoy busca el modo de
hallar turnos al bate para Luis Valbuena y Jed Lowrie. O quizás fuera el
natural devenir de las cosas: los Astros necesitaron un cupo en el roster de 40,
dispusieron del de Torreyes y otros elencos se interesaron.
Los Azulejos lo tomaron en waivers. No bateó en triple A.
Tampoco había bateado en su inicio de zafra, en las granjas de Houston. No
pasarían muchos turnos para que volviera a ser puesto en asignación.
Tampoco había bateado en su inicio de zafra, en las granjas de Houston. No
pasarían muchos turnos para que volviera a ser puesto en asignación.
Los Dodgers apostaron por él, como antes aquellas cuatro
organizaciones que contaron con sus servicios. Pagaron una suma no revelada por
su contrato y lo asignaron a doble A. Tenía una línea de .175/.208/.200 al
momento de la transacción. Mucho ojo o mucha fe para el departamento de
desarrollo de los esquivadores. Y esa fe movió una montaña.
organizaciones que contaron con sus servicios. Pagaron una suma no revelada por
su contrato y lo asignaron a doble A. Tenía una línea de .175/.208/.200 al
momento de la transacción. Mucho ojo o mucha fe para el departamento de
desarrollo de los esquivadores. Y esa fe movió una montaña.
Torreyes se soltó a batear en julio. No paró hasta llegar a
las mayores. Cerró la zafra en las menores con .261/.308/.347, una levantada
notable, si recordamos sus números en junio.
las mayores. Cerró la zafra en las menores con .261/.308/.347, una levantada
notable, si recordamos sus números en junio.
En Los Ángeles fue recibido por José Peraza, otro criollo
que se estrenó primero en el norte que en la LVBP.
que se estrenó primero en el norte que en la LVBP.
Qué casualidad, ambos en el mismo año, con los mismos
Dodgers y perteneciendo aquí a los mismos Tigres. Otra curiosidad sin parangón
que habrá que comentar al hablar del largo giro de Torreyes rumbo a la MLB.
Dodgers y perteneciendo aquí a los mismos Tigres. Otra curiosidad sin parangón
que habrá que comentar al hablar del largo giro de Torreyes rumbo a la MLB.
Publicado en El Nacional, el martes 15 de septiembre de 2015.
Otra curiosidad, ambos tanto Peraza y Torreyes son de Libertad-Barinas.