Por Marcos Grunfeld
El venezolano Gleyber Torres comenzó el Spring Training generando una enorme expectativa sobre su regreso a la versión que mostró en 2018 y 2019. En los 34 turnos que consumió en los juegos de exhibición bateó 3 jonrones y dejó promedios de .294/.351/.559 en 12 compromisos. Eso todavía desafortunadamente no se ha traducido en un éxito en la contienda actual, al menos no del todo.
El infielder fue una grata noticia el sábado por primera vez en 2022, después de que salió de la banca en el cierre de la novena entrada. El camarero soltó un tremendo cable al jardín derecho y dejó en el terreno a los Guardianes de Cleveland. En otro momento, ese batazo hubiera sido un doble, quizás. Pero aquí solo necesitaba un sencillo para lograr la victoria de su club y así le fue acreditado.
Ese fue la génesis para un gran fin de semana que vivió el caraqueño con tres imparables en cinco viajes al plato, incluyendo un doble. Quizás este es finalmente el despertar del cual habló su mánager Aaron Boone que declaró en las últimas horas que no estaba preocupado por el embajador vinotinto porque estaba haciendo buenos swings, pero eso no se había traducido en mejores resultados.
Pero hay un aspecto más que descubrió el portal Fansided.
«Él se ha convertido en un artillero más maduro», analiza el sitio web especializado. «Ha hecho la transición a un toletero más paciente y se ha puesto en una posición para batear mejor. Lastimosamente, eso no ha ocurrido. Él tiene apenas 25 años y todavía tiene potencial de convertirse en un mejor pelotero».
Quizás este fin de semana comenzó esa transición porque el embajador vinotinto ha dado cinco incogibles en sus últimos nueve turnos. Ese breve despertar aún no se traslada en sus números globales porque en sus primeros 15 cotejos promedia .227/.286/.364. Aunque ha aumentado 80 puntos su average en los últimos cinco partidos que no es poca cosa, luego de su lento inicio.
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«Ser más selectivo y darle a mejores lanzamientos debería ponerlo en una situación mejor», agrega el reporte. «Pareciera que la falta de poder se debe a un problema de mecánica. Pero cabe mencionar que la expectativa de 35 o más jonrones de Gleyber Torres no es un escenario realista. Él pareciera ser un pelotero de .750 u .820 de OPS, con 25 o 30 cuadrangulares por año. Eso estaría bien para los Yanquis».
DATO. Parte del análisis de Fansided se reduce a que Gleyber Torres tuvo muy buenos números en sus dos primeras campañas contra los Orioles de Baltimore, un equipo en reconstrucción. De los 62 cuadrangulares que pegó esos dos primeros dos años, 16 fueron contra los alados. Dejando esa cifra de lado, el venezolano hubiera pegado unos 24 bambinazos por temporada.
(Marcos Grunfeld)
