Por Alfredo Villasmil Franceschi
Cuando a un pelotero que no es regular le dan el chance de jugar debe disuadir. Eso fue lo que hizo Oswaldo Cabrera este sábado con los Yanquis de Nueva York.
El venezolano salió a jugar la tercera base, posición que por lo general está en poder de Josh Donaldson, y se lució a la ofensiva con tres sables en cuatro turnos al bate, anotada y remolcada.
Oswaldo Cabrera ha estado muy inestable con el bate, pero en esta oportunidad convenció a todos. Soltó tres buenas líneas. Esto hizo posible que su línea ofensiva quedara en .206/.254/.309. Cabrera tuvo un mes de junio para el olvido donde apenas tomó 17 turnos y pudo conectar solamente tres hits.
Cabrera ha sabido aprovechar las oportunidades que últimamente le han dado. En los últimos siete juegos lleva de 6-4 con cuatro anotadas y una carrera impulsada.
El venezolano había sido enviado a las menores a principios de junio, regreso el 3 de ese mismo y reapareció con jonrón. Luego se volvió a apagar
Uno de los hits de Cabrera este sábado fue un batazo atravesado, por encima de la raya de la tercera base que permitió que los Yanquis anotaron la primera del juego. En ese momento perdían 11 a 0.
Cabrera este año ha estado presente en los tres jardines, en la inicial, en la antesala y como bateador designado.
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UN DATO. Oswaldo Cabrera le ha dado duro a la pelota. Ocho de sus últimos 20 hits han sido extrabases (4 dobles, 4 jonrones)
(Alfredo Villasmil Franceschi)
Foto: @Yankees
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Lastima porque a partir de allí lo sentaron. Le dieron oportunidad a Donalson y Lemahiue que entre los dos van de 12-0.
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