Y
por fin, ¿quién gana la Serie Mundial?
De
cerca o de lejos, todos en Estados Unidos siguen el clásico de octubre
DETROIT
El rubio y
blanquísimo agente de policía habló en perfecto castellano: “Y por fin, ¿quién
gana la Serie Mundial?”.
blanquísimo agente de policía habló en perfecto castellano: “Y por fin, ¿quién
gana la Serie Mundial?”.
La placa en
el costado izquierdo del pecho ponía “Ortiz”. Estaba claro el porqué de su
pronunciación.
el costado izquierdo del pecho ponía “Ortiz”. Estaba claro el porqué de su
pronunciación.
“Mi padre
es español”, explicó el agente. “Y cuando llegó a Estados Unidos, se hizo
seguidor del beisbol y de los Rojos de Cincinnati. Tony Pérez, Joe Morgan, Pete
Rose, ya sabes, todos ellos”.
es español”, explicó el agente. “Y cuando llegó a Estados Unidos, se hizo
seguidor del beisbol y de los Rojos de Cincinnati. Tony Pérez, Joe Morgan, Pete
Rose, ya sabes, todos ellos”.
Coincidencia.
Ahora la conversación podía girar alrededor de gustos compartidos.
Ahora la conversación podía girar alrededor de gustos compartidos.
“Ojalá el
próximo año seamos nosotros los que estemos en la Serie Mundial”, prosiguió el
agente, con notable dominio del tema, tratándose de un simple aficionado, a
kilómetros de distancia de Cincinnati. “Nos faltó un primer bate este año.
Quizás en 2013 tengamos ese primer bate con (Billy) Hamilton”.
próximo año seamos nosotros los que estemos en la Serie Mundial”, prosiguió el
agente, con notable dominio del tema, tratándose de un simple aficionado, a
kilómetros de distancia de Cincinnati. “Nos faltó un primer bate este año.
Quizás en 2013 tengamos ese primer bate con (Billy) Hamilton”.
Mucha gente
en Estados Unidos sabe que el clásico de octubre se juega en estas fechas,
aunque el rating de las transmisiones de TV no sea el más elevado. San
Francisco está en la costa oeste y Detroit no es un mercado grande, como
Chicago o Nueva York.
en Estados Unidos sabe que el clásico de octubre se juega en estas fechas,
aunque el rating de las transmisiones de TV no sea el más elevado. San
Francisco está en la costa oeste y Detroit no es un mercado grande, como
Chicago o Nueva York.
La ciudad,
sin embargo, vive con pasión su primera Serie Mundial desde 2005.
sin embargo, vive con pasión su primera Serie Mundial desde 2005.
Cerca del
hotel, en el centro, hay una iglesia baptista, la Iglesia de Cristo de Detroit.
Afuera, una pantalla invita a la misa dominical.
hotel, en el centro, hay una iglesia baptista, la Iglesia de Cristo de Detroit.
Afuera, una pantalla invita a la misa dominical.
“Domingo,
8:15 am y 12:30 pm: la Sagrada Eucaristía”, pone el aviso luminoso.
8:15 am y 12:30 pm: la Sagrada Eucaristía”, pone el aviso luminoso.
Segundos
después, el mensaje cambia: “Sábado, 8:13 pm: tercer juego de la Serie Mundial.
¡Vamos, Tigres!”.
después, el mensaje cambia: “Sábado, 8:13 pm: tercer juego de la Serie Mundial.
¡Vamos, Tigres!”.
“Creo que
después de perder los dos primeros en San Francisco, Detroit está condenado”,
soltó el agente Ortiz.
después de perder los dos primeros en San Francisco, Detroit está condenado”,
soltó el agente Ortiz.
Puede ser.
Pero puede que no. El beisbol tiene esa maravilla: una serie corta la gana
cualquiera y ninguna diferencia es imposible de remontar.
Pero puede que no. El beisbol tiene esa maravilla: una serie corta la gana
cualquiera y ninguna diferencia es imposible de remontar.
Que lo
digan los Medias Rojas de 2007, que perdían tres juegos por cero ante los
Yanquis y terminaron ganando cuatro encuentros por tres.
digan los Medias Rojas de 2007, que perdían tres juegos por cero ante los
Yanquis y terminaron ganando cuatro encuentros por tres.
Así que,
por fin, ¿quién gana la serie?
por fin, ¿quién gana la serie?
Según los
antecedentes, 81 por ciento de los equipos que se llevan los dos primeros en
casa terminan con la corona.
antecedentes, 81 por ciento de los equipos que se llevan los dos primeros en
casa terminan con la corona.
Gracias a
Dios hay un 19 por ciento restante que nos permite creer que, al final,
cualquier cosa puede ocurrir.
Dios hay un 19 por ciento restante que nos permite creer que, al final,
cualquier cosa puede ocurrir.
Incluso con
esta abrumadora ventaja que hoy tienen los Gigantes.
esta abrumadora ventaja que hoy tienen los Gigantes.
Publicado en el-nacional.com, el sábado 27 de octubre de 2012. (ver link)
Ignacio, buenas noches. Los Red Sox de la remontada ante los NYY, son la versión 2.004, precisamente la del año en que terminó la leyenda de la maldición de "El Bambino"…
Saludos!