El balance de los tres meses iniciales muestra mejores cosas entre los bateadores criollos que entre los lanzadores, a pesar de la pareja actuación de varios abridores. Ya 70 venezolanos han jugado en las mayores este año
Asdrúbal y Miguel Cabrera tienen mucho en común
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Comparten el apellido y una legión de seguidores. Son piezas centrales de equipos que pelean por la vanguardia en la misma división y serán candidatos al Jugador Más Valioso si los Indios o los Tigres avanzan a los playoffs.
Los dos Cabrera también comparten el privilegio de haber sido los peloteros más sobresalientes de Venezuela en la primera mitad del campeonato.
Los 30 clubes de la gran carpa disputaron en algún momento de la semana pasada su juego número 81. Esta semana, oficialmente, la segunda parte del calendario ha comenzado.
Asdrúbal Cabrera la inicia como el venezolano con más inatrapables, 95, y uno de los torpederos con mejores números ofensivos en ambos circuitos.
Los Indios han sufrido bajas por lesiones y comenzaron el torneo en reconstrucción. Un título divisional apuntalaría la candidatura de quien, con 14, busca el récord de jonrones para un shortstop criollo (23, de Alex González) y presenta una línea de .291/.341/.496.
Miguel Cabrera protagoniza una campaña típica para él: disputa el título de bateo, con .328 puntos, y es uno de los mejores del beisbol con su promedio de embasado de .446, su slugging de .572 y sus 1.018 puntos de OPS.
El cuarto bate de los Tigres se encamina a otro palmarés de 40 dobles, 35 jonrones y 100 empujadas, pero dependerá de una corona felina para pretender el Más Valioso.
La huella que queda. Omar Vizquel es el más venerable entre esos 70 nativos que vieron acción en la primera mitad. Se convirtió en el primer jugador desde 1918 en defender las paradas cortas a los 44 años de edad y deja su impronta como antesalista, camarero y bateador.
No sólo la longevidad es memorable en el caraqueño. En los primeros tres meses superó los 2.800 hits y todavía muestra la forma de alguien que podría seguir en acción la temporada venidera, con .270 de average en 121 apariciones al plato.
Félix Hernández tiene 8 victorias, más que en la primera mitad de 2010, y está tan claro que no aspira al Cy Young ahora como claro estaba hace un año que sí lo merecía.
Hernández (8-7, 3.35) ha tenido buena cosecha, pero otros compatriotas le igualan: Jhoulys Chacín (8-5, 3.10), Carlos Carrasco (8-4, 3.54), Aníbal Sánchez (6-2, 3.30) y el feliz regreso a los primeros planos de Freddy García (7-6, 3.13).
Francisco Rodríguez se encamina a los 40 salvados, por primera vez desde 2009. Rafael Betancourt se convirtió en el tercer venezolano con 500 juegos lanzados. Pablo Sandoval ha regresado al estrellato y Víctor Martínez le disputa a Miguel Cabrera la corona de los bateadores de la Liga Americana.
Ramón Hernández ha vuelto a batear, Elvis Andrus ha corrido sin parar y Bob Abreu, con su sucesión de marcas, ha puesto la nota alta entre lo mejor de Venezuela en la primera mitad.
La segunda mitad traerá, si no hay retrocesos, el retorno de Johan Santana a las primeras planas.
El zurdo merideño se alista en Port St. Lucie para integrarse a la rotación de los Mets en algún momento del mes de agosto. Quizás esté a tiempo de ayudar a los metropolitanos a dar la sorpresa en la recta final o quizás una sorpresa de ese equipo sea un imposible. Pero su vuelta, sin duda, es esperada por todos, con la duda de constatar cuán recuperado puede estar de la cirugía en el hombro a la que fue sometido hace menos de un año.
En los últimos meses de campeonato también estará a prueba el récord de venezolanos en una temporada de grandes ligas. El año pasado fueron 89, incluyendo a quienes estuvieron la zafra entera en la lista de incapacitados, y en 2011 ya son 75 los que tienen esa condición.
Publicado en El Nacional, el martes 5 de julio de 2011.
