El zuliano sumó 11 derrotas seguidas entre 2003 y 2005, mientras que el infortunio del mirandino duró entre 2010 y 2011, con 8 tropiezos al hilo
Felipe Paulino tenía este martes la esquiva tarea de anotarse la victoria frente a los Medias Blancas.
El derecho mirandino tomó la pelota con un handicap en contra: ningún miembro activo de la expedición venezolana reunió una sequía más larga como la de Paulino, con ocho derrotas y ningún triunfo entre el 9 de junio de 2010 y el 28 de junio de este año.
El lanzador de los Reales trepó al montículo 33 veces durante su cadena sin lauros, 9 de ellas como abridor. Y al culminar la jornada, por fin, se anotó un éxito en su cuenta.
Paulino no es el lanzador criollo con la peor fortuna. La historia de las grandes ligas recoge seguidillas aún más prolongadas que la del nativo de Ramo Verde, comenzando con Géremi González, el verdadero rey de la mala suerte de Venezuela.
González pasó casi dos años sin ganar en las mayores, entre el 24 de agosto de 2003 y el 2 de mayo de 2005. Cierto, en ese lapso lanzó 19 encuentros, varios menos que su compatriota, pero entre sus 16 aperturas y sus 3 relevos acumuló 11 caídas al hilo.
Jamás un venezolano ha empalmado tantos tropiezos consecutivos, aunque Felipe Lira estuvo muy cerca.
Lira tuvo en su poder la marca anterior al zuliano. Entre el 14 de julio de 1996 y el 25 de abril de 1997 trabajó en 20 encuentros, 15 desde el inicio, y tuvo marca de 0-9.
Carlos Silva también tuvo foja de 0-9 en un instante de su carrera. Ocurrió entre el 23 de abril y el 22 de junio de 2008, con el agravante de que lo hizo en apenas 12 salidas, todas desde el primer inning.
Paulino tiene motivos para sentirse inconforme. Normalmente, los serpentineros que han sufrido rachas semejantes tienen una efectividad pobre, como la suya de 5.44 a partir del 9 de junio del año pasado y antes de la presentación del martes.
Pero el diestro puede excusarse, al menos desde que llegó a la Liga Americana. En sus primeras siete incursiones con los Reales, seis de ellas en la rotación, puso 3.21 de efectividad, un WHIP de 1.19 y 3,6 ponches propinados por cada base por bolas.
Todas esas cifras superan la media que ha impuesto el grandullón de los Bravos de Margarita a su paso por la gran carpa.
Wilfredo Ledezma (de 2007 a 2010) y Jorge Julio Tapia (de 2002 a 2004) también llegaron a poner registros de 0-8, como que logró sacudirse el tirador de Los Teques.
Paulino pasó otras dos veces por este desierto. Tanto en 2009 como en 2010 tuvo rachas en las que mostró 0-7 de récord. Y eso, al lado de esta tercera sequía, quizás sí le permita disputarle a González la corona honoraria como el rey del infortunio.
Omar Daal también aspira al título de monarca del infortunio. En la campaña de 2000 tuvo dos seguidillas de 0-7 casi consecutivas, la primera del 30 de mayo al 2 de agosto y la segunda entre el 13 de agosto y el 21 de septiembre
11
Géremi González, del 24 agosto de 2003 al 2 mayo de 2005.
9
Felipe Lira, del 14 julio de 1996 al 25 abril de 1997.
8
Felipe Paulino, del 9 de junio de 2010 al 28 de junio de 2011.
Wilfredo Ledezma, del 22 de abril de 2007 al 3 de octubre de 2010.
Jorge Julio, del 24 de agosto de 2002 al 4 de mayo de 2004.
(Con 7 aparecen Felipe Paulino, dos veces; Ángel Guzmán, en 2006; Franklin Morales, entre 2010-2011; Yusmeiro Petit, entre 2008 y 2009; Armando Galarraga, en 2009; Felipe Lira, en 1997; Ugueth Urbina, entre 2001-2022; Omar Daal, dos veces en 2000; y Kelvim Escobar, en 2006.)
Ampliación y actualización de la nota publicada en El Nacional, el miércoles 6 de julio de 2011.
