El manager Joe Girardi aceptó que desea ver más veces en el lineup de los Yanquis al carabobeño
El jonrón que Jesús Montero le bateó a Jared Weaver fue el mejor modo de anunciar un nuevo rol para el carabobeño en la alineación de los Yanquis.
Montero, subido el 1° de septiembre para ser usado como bateador designado contra pitchers zurdos, castigó un envío del as californiano, un derecho, para llegar a tres jonrones en seis partidos y confirmar con los hechos las palabras de su manager, Joe Girardi.
“Creo que ustedes quieren verlo más veces”, señaló Girardi, casi juguetón, al admitir ante The Journal News que el joven tendrá más actividad.
Montero es un bateador nato, pero su presencia en el orden ofensivo significa que el veterano Jorge Posada, una institución en Nueva York, debe quedar en la banca. La fórmula que encontraron los bombarderos fue alternarles, según la mano del pitcher rival.
La sequía de Posada y el impetuoso debut del nativo de Guacara han hecho que Girardi cambie su punto de vista.
“No creo que quieran verlo sentado en juegos consecutivos”, declaró el piloto, en referencia al venezolano. “Hay que mantenerlo en acción. Está haciendo muy buen swing, ha mostrado paciencia en el plato y ha exhibido la capacidad para hacer ajustes”.
Montero conectó 7 hits en sus siguientes 16 turnos, luego de fallar los primeros cuatro viajes que consumió en la gran carpa. Antes del encuentro de ayer tenía .350/.435/.800, con tres cuadrangulares y seis remolques.
El ritmo del prospecto opaca casi todo inicio de sus más célebres compatriotas.
Miguel Cabrera bateó .261, sin boletos, aunque con .561 de slugging (gracias a dos tubeyes, un triple y un bambinazo) en los primeros seis juegos que disputó arriba.
Andrés Galarraga conectó para .154, sin extrabases, y Víctor Martínez ligó para .133 con .267 de OPS en el mismo lapso.
Antonio Armas debió esperar hasta el encuentro 31 de su carrera para celebrar su primer vuelacercas. Carlos González no festejó una tabla de cuatro esquinas hasta su choque 19 y Bob Abreu lo hizo en su duelo 33.
Magglio Ordóñez es la única referencia para Montero. En sus seis cotejos iniciales, en 1997, el falconiano bateó para .421/.421/1.000, con tres jonrones y cuatro empujadas en 20 turnos.
Girardi ya anunció que el novato estará en los playoffs, de seguir así.
“Jugará quien batee”, señaló el estratega, días atrás. Y Montero no ha dejado de batear.
Publicado en El Nacional, el domingo 11 de septiembre de 2011.
