Los Leones derrotaron anoche a los Navegantes, 8 carreras por 5, en el estadio Universitario. ¿Fue sólo un resultado más, una rara victoria en un año de derrotas, o el inicio de la reconstrucción? Al menos hay señales auspiciosas
Caracas logró este miércoles una tarea casi imposible, en esta temporada irreconocible para sus maderos: ganar un juego que perdía después del quinto inning.
Asdrúbal Cabrera empató el partido con un jonrón de dos carreras en el sexto acto, Carlos Rivero y Leonardo Gil consiguieron la ventaja con triples consecutivos en el séptimo y Jesús Guzmán empujó su primera rayita en casi una semana, para conducir a los Leones a una victoria viniendo de atrás frente a los Navegantes, 8 por 5, en el estadio Universitario.
Fue una jornada de raras hazañas para esta por ahora improductiva versión de los felinos: Cabrera tenía 14 turnos fallados al hilo, antes de sacudir su cuadrangular; ninguna pareja de melenudos había logrado dos tribeyes en fila esta temporada y Guzmán logró, como segundo bate, lo que tanto le ha costado hacer como cuarto y quinto toletero.
La mayor de todas las rarezas fue la más importante de aquellas ocurridas en la noche: los capitalinos perdieron 15 de las anteriores 18 ocasiones en que llegaron abajo al sexto tramo. Voltear el duelo ante Magallanes puede, incluso, tener un valor motivacional.
“Este triunfo nos permite ver las cosas de una manera distinta”, aseguró el manager Rick Sweet.
Los turcos tomaron ventaja con cuatro rayitas en los primeros dos episodios ante Thad Weber, que parecía caer noqueado. Matt Wright, en la acera de enfrente, tiró cinco entradas en blanco para los visitantes.
Todo cambió de súbito a favor de los anfitriones, que habían hecho su única anotación en el segundo, gracias a tres incogibles.
Weber enderezó la carga. En el resto de su labor, que terminó después de seis innings completos, no encajó más imparables y apenas embasó a dos bateadores más por boletos.
Wright recibió dos cohetes en el sexto que le enviaron a las duchas, asomando el desplome de su divisa. Porque el usualmente seguro Deolis Guerra, a continuación, vio cómo un pitcheo suyo caía en las gradas del center, para igualar la pizarra y cambiar la suerte de los metropolitanos.
El Caracas fue una tromba a partir de allí. El club con el peor average colectivo (.235) y el segundo peor slugging de la liga (.323) logró cuatro extrabases en un lapso de nueve bateadores, incluyendo los triples de Rivero y Gil, más un doble de Guzmán que, dada su sequía, pareció toda una epifanía.
Franklin Morales, con algunos apuros en el octavo, sacó los últimos cuatro outs, para el salvado.
“No estamos acabados”, soltó Guzmán, casi como un desafío.
Todavía son cuatro juegos de diferencia para alcanzar a los carabobeños en el quinto lugar. Aún es demasiada la distancia. Pero el triunfo quizás sea la prueba que necesitaban los Leones para creer que sí es posible cambiar el destino.
Asdrúbal Cabrera y Jesús Guzmán mostraron parte de esa camaradería que se vive en el clubhouse caraquista y que con el triunfo contra Magallanes recibió una inyección de vitalidad.
«Aún no tenemos la X de eliminados, así que cualquier cosa puede pasar. Nosotros no nos vamos a rendir», exclamó Guzmán, quien durante la intervención del grandeliga de los Indios de Cleveland bromeaba con un «ojalá, ojalá» cuando se hacía mención de una necesaría reacción melenuda.
«Espero que esto sea el comienzo», comentó Cabrera. «Todo se debió a la concentración. Jamás había enfrentado a ese chico (Deolis Guerra) y salí a batear siguiendo los consejos de Marwin (González), que me dijo que su mejor pitcheo era el cambio y ese fue el que salir a buscar. Menos mal que lo tiró y pude conectarle bien».
Rick Sweet, mánager caraquista, también destacó el trabajo que se ha realizado dentro del vestidor de los avileños.
“Luego del juego del domingo, tuvimos varios mitines y hoy se vio un equipo completamente distinto», dijo el estratega. «Lo que vimos es lo que necesitamos de ahora en adelante”.
Adron Chambers fue sacado del lineup por los Leones debido a molestias en una corva y fue sustituido en el center y al tope de la alineación por Corey Wimberly… Leonardo Gil estuvo tendido algunos minutos con un golpe en un tobillo que se produjo en segunda, pero pudo seguir en acción… Mario Lissón nunca ha jugado en el outfield en las menores y sólo lo había hecho tres veces en Venezuela, antes de abrir anoche el primer encuentro de su carrera en los jardines… Asdrúbal Cabrera falló 14 turnos seguidos, antes de sonar su cuadrangular… Brayan LaHair pasará Navidad en Estados Unidos y la gerencia del equipo no tiene certeza si regresará al país… Ezequiel Carrera reapareció, luego de perderse dos encuentros por una inflamación en el dedo índice derecho… Víctor Santos y el cubano Alexander Carreras seguirán trabajando en la paralela… Adonis García lleva siete encuentros con al menos un imparable… 13.147 personas pagaron entradas en el estadio Universitario.
Publicado en El Nacional, el jueves 15 de diciembre de 2011. Ismael G. Granadillo N. colaboró con esta nota.
