Wilfredo Boscán, el Novato del Año y el premio Carrao Bracho
Wilfredo Boscán se despidió con cinco innings en blanco, días atrás, poniendo fin a su actuación en la temporada 2011-2012.
El prospecto ha lanzado más de 180 entradas este año, por lo que la llamada telefónica que le hicieron los Rangers, instándole a parar, tenía mucho sentido, tomando en cuenta la edad del lanzador.
Claro, para las Águilas fue un golpe noble, pero al menos desde el punto de vista personal, para Boscán, ese último episodio que retiró contra los Tiburones, en Maracaibo, probablemente haya sido el inning más importante de su naciente carrera en Venezuela, pues le garantizó la posibilidad de pelearle a Héctor Sánchez el galardón al Novato del Año e incluso le permitirá sacar muchos votos en el premio Carrao Bracho al Pitcher del Año.
Con esos últimos tres outs ante La Guaira, Boscán llegó a 42 actos en la zafra, es decir, alcanzó el mínimo requerido para aspirar al liderato de efectividad.
Dijo adiós con 1.71 de promedio, la tercera mejor cifra del torneo para ese momento, y ocupa uno de los primeros cinco puestos entre los pitchers con mejor relación de hits y de boletos por cada nueve entradas lanzadas.
De haberle faltado aunque fuera un tercio, Boscán no habría aparecido entre los líderes de esos departamentos al final de la campaña, lo que le habría restado figuración y, de seguro, una parte importante de la votación, como le ocurrió al también serpentinero de los occidentales, Alex Torres, al marcharse en la 2010-2011 con menos de los 42 episodios necesarios.
El zurdo Torres fue uno de los mejores lanzadores en la primera parte del torneo pasado. Tenía 1.91 con marca 4-1 y una muy buena relación de 30 ponches y tan sólo 8 boletos en 28.1 episodios. Permitió menos de 7 hits por cada 9 entradas y dejó a muchos en Maracaibo lamentando la orden de Tampa Bay, que no le dio permiso de lanzar en la segunda mitad de la zafra.
Torres era un claro candidato al Carrao Bracho y al Novato del Año, pero no transcurrió mucho tiempo antes de que saliera de todos los lideratos del circuito. Cedió posiciones en los departamentos acumulativos, como victorias y abanicados, porque no pudo acumular más cifras. Y desapareció en los departamentos medidos en promedios, porque todo pitcher necesita tener dos tercios de inning por cada juego disputado de su equipo, a fin de poder competir en esos renglones.
Al final, aunque consiguió votos para ambos premios, no ganó ninguno. Su nombre ya no estaba en posición de cautivar a los votantes, pues había sido desplazado en todas las categorías.
Con Boscán no pasará eso. De hecho, ya comenzó a cosechar los frutos de haber conseguido el mínimo de 42 actos. Jerome Williams, que era el rey en efectividad y figuraba en casi todas las estadísticas que se miden por promedios, desapareció por completo de esas tablas, al no tener ya el mínimo de entradas requeridas para seguir aspirando, mucho menos para ser el campeón de alguna de esas categorías al final de la ronda regular.
El nativo de Maracaibo tiene cifras menos impactantes que las de Torres en su momento, salvo por la efectividad, pero en el último día del campeonato, cuando los periodistas, narradores y comentaristas procedamos a llenar nuestras planillas de votación, al buscar entre los líderes encontraremos a Boscán.
Por ahora, nada parece amenazar a Renyel Pinto como el principal candidato al Carrao Bracho y Héctor Sánchez ha quedado como el favorito para recibir el Novato del Año, pero el derecho zuliano va a estar entre los más votados, con toda seguridad, gracias a ese último episodio que lanzó contra La Guaira.
Publicado en El Nacional, el domingo 11 de diciembre de 2011.
