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Las tareas pendientes de la LVBP

Alex Herrera durante la final pasada

La final empieza este lunes. El momento es adecuado para hablar de dos asignaciones pendientes en nuestra pelota.

En los últimos años, el calendario ha sido elaborado de tal modo, que sólo hay un día de descanso en la serie decisiva. Esto trae inconvenientes que ya vimos hace un año, durante el choque entre los Caribes y los Tigres.

En un tiempo en el que es tan difícil mantener intacta la nómina, donde las bajas debido a órdenes del beisbol organizado y las limitaciones impuestas desde el norte son tan frecuentes, es riesgoso para el espectáculo forzar a los pitchers de los finalistas con la posibilidad de disputar siete juegos en ocho días.

Hace 12 meses, Anzoátegui y Aragua nos brindaron un duelo emocionante, no hay duda, pero la calidad del espectáculo en ocasiones fue pobre, al mostrar señales de agotamiento los relevistas y permitir que varias veces el marcador se abultara.

Pero esto no es lo único: el circuito ha fijado que el día de descanso sea después de los primeros dos encuentros, por lo que, si la serie se alarga al máximo de siete, ambos equipos están obligados a armar rotaciones de cinco abridores.

No es una nimiedad. Traten de encontrar cuál equipo tiene, en este momento, cinco monticulistas listos para iniciar partidos. Los Tigres tendrían que echar mano a Yorman Bazardo, los Navegantes a Pedro Guerra y así sucesivamente, sin que ninguno de los elegidos pueda garantizar una labor de largo metraje.

Volvamos al ejemplo de hace un año, cuando los Caribes ni siquiera contaron con cuatro abridores; ambos equipos se vieron forzados a utilizar a sus relevistas desde el mismo primer inning por lo menos en una ocasión. Otro punto en contra del espectáculo.

(En esta ocasión hay circunstancias que pueden ennegrecer aún más el panorama, al disputarse una jornada doble en el Universitario para definir al último clasificado, este domingo; el vencedor irá sin descanso a Maracay, con al menos uno de sus abridores imposibilitado de lanzar hasta el viernes, o incluso dos, de tratarse de los orientales o del Magallanes; eso, sin hablar del trabajo extra de los relevistas por causa de tener que trabajar en una fecha prevista inicialmente para el descanso.)

La liga, a través de sus ocho integrantes, se rehúsa a hacer cambios drásticos en el calendario, prefiriendo el albur de que las postergaciones por lluvia no sean muchas y que de ese modo no se complique la acción. Pero sería prudente en un futuro buscar una alternativa que le dé dos días de descanso a los protagonistas de la final, o que, en el peor de los casos, la única fecha libre ocurra después del tercero o cuarto duelo, para que las rotaciones puedan ser de cuatro hombres y no de cinco.

Otra materia pendiente de la liga es proponerle a los equipos, ahora sí, una campaña en contra de la violencia y a favor de la deportividad, tanto en el terreno como en las tribunas.

Esa promesa se hizo hace exactamente 12 meses, pero muy poco se logró en esta temporada que termina.

El circuito puede y debe diseñar un proyecto que involucre el sonido interno y los circuitos de transmisión de los clubes, propaganda fija en las entradas del público a los estadios, volantes, exhortos donde se hable del valor que tiene el poder aplaudir al adversario, el competir en buena lid y saber sobrellevar la derrota.

La campaña “Por un juego perfecto”, de Empresas Polar, es un ejemplo a seguir. Una vez lo dijimos, pero hay que insistir: todos podemos hacer algo para que nuestro país sea mejor. Así resulte un aporte modesto, mucho lograremos si aficionados, jugadores, gente de los medios, patrocinadores y equipos profesionales empujamos juntos para desterrar la violencia de nuestros estadios.

De vez en cuando todavía se ve volar trozos de hielo hacia el diamante, lanzados por molestos fanáticos, sin olvidar esos episodios sin precedentes que ocurrieron en la eliminatoria, con una persona tirándose al campo para increpar a un umpire y un pelotero cacheteando a un árbitro debido a la frustración del momento.

Renny Ottolina nos enseñó el camino en los años 70, una época en la que todos fuimos un poquito mejores ciudadanos al vernos reflejados en sus excepcionales campañas de TV. Nada cuesta llevarlo a cabo y mucho ganaremos todos.

Publicado en El Nacional, el domingo 22 de enero de 2012.

Ignacio Serrano
Ignacio Serranohttps://elemergente.com/
Soy periodista y actor, y escribo sobre beisbol desde 1985. Durante 33 años fui pasante, reportero y columnista en El Nacional, ESPN y MLB.com, y ahora dirijo ElEmergente.com. También soy comentarista en el circuito radial de Cardenales de Lara y Televen. Premios Antonio Arráiz, Otero Vizcarrondo y Nacional de Periodismo.

6 COMENTARIOS

  1. Buen artículo, es necesario.

    La temporada regular se debería comenzar el primer día de octubre, los jugadores de ligas menores que son los que empiezan ya terminaron, incluso los que jugaron playoffs, también los de la liga mexicana, y la fanaticada está acostumbrada a que la calidad al principio sea de clase A a doble A, por lo que eso no debe ser motivo para que la asistencia decaiga.

    Además una liga un poco menos competitiva al principio ayudaría a probar jóvenes durante parte del largo calendario y reservaría a los grandeliga para la postemporada, algo que es necesario sobre todo con esa nueva regla de los rosters semanales que tanto desgasta a los jugadores. Quizás tendríamos a más de un Darwin Pérez en nómina o a un Gerardo Parra jugando semifinal desde diciembre.

  2. Ignacio, creo que me voy a enrollar más todavía…

    Estoy de acuerdo en lo que dices y, a riesgo de que casi todos estén en contra mía, creo que la solución es una sola:

    TENEMOS QUE DEJAR DE SER UNA LIGA INVERNAL PARA SER UNA LIGA DE VERANO

    !No hay más!

    Yo como aficionado me niego a ver menos de 63 juegos (extraño aquella vez que se jugaron 100 y yo era niño). Tampoco quiero cambiar el formato de RR, es una "guerra a muerte" y me atrevería a decir que NO HAY EN TODO EL BÉISBOL MUNDIAL ALGO MÁS EXCITANTE Y EMOCIONANTE QUE UNA LIGUILLA A 16 JUEGOS COMO LA QUE TENEMOS. La emoción es extrema y eso pasa casi todos los años. Como aficionado quiero que MI LIGA (la Venezolana, no la MLB) tenga el mismo peso mundial que la Japonesa o la Coreana.

    Todo lo que dices: "difícil mantener intacta la nómina, bajas debido a órdenes del béisbol organizado, limitaciones impuestas desde el norte", yo agrego, peloteros cuidándose para jugar en MLB, paradas desde Japón e incluso desde Corea. Y ya no hablemos de la pantomima que es hoy en día la Serie del Caribe.

    Es necesario cambiar. Tenemos el mejor béisbol del caribe, no hay duda de ello, al menos en cuanto a fanaticada es la mejor. ¿Entonces?, entonces lo que hay que hacer es arrastrar a Caracas, La Guaira, Zulia y Magallanes desde marzo a octubre. Esos 4 equipos se llevan  un 80% de la fanaticada y todo fanático seguirá a su equipo esté donde esté. Yo seguiré a mi Magallanes aunque juegue en Lima, Perú. Y estoy seguro que los de los Tigres, Caribes, Bravos y Cardenales, harían lo mismo. Lo importante es reír o llorar por tu equipo no si Magglio, Guillén, Abreu, Parra y un largo etc. juegan o no no.

    No es fácil. Lo sé. De entrada se perderán muchos "muchachitos" que juegan hoy en día pero por otra ganaremos en peloteros que no tengan que retirarse pronto. Por ejemplo, ¿qué ha pasado con los ganadores de novato del año de los últimos 10 años?, ¿cuantos quedan jugando?, ¿eran tan malos que solo sirvieron para la temporada de debú?… no, lo que pasa es que en 63 juegos hay poco para inventar, poco tiempo para dar chance. A un manager le resulta más fácil poner a jugar un venezolano que brilló en AA o AAA que a un "pseudo-.veterano" que la temporada pasada lo despidieron del norte. Eso pesa, vamos a "rastras de la MLB" y no de nosotros mismos: ¿quieren un ejemplo?: "Jonel Pacheco. Cuando el pelotero juega tiene chance de desarrollarse y de jugar bien. En 100 o más juegos (sería excelente tener 160) da para mucho (que le pregunten al Caracas o a los Cardenales de este año, ¿qué sería de ellos si la temporada hubiera tenido 100 juegos? y ya no digamos el "pseudo-equipo" del Zulia que acabamos de ver en el RR)

    Otra cosa, se han dado cuenta que cada vez es más frecuente que peloteros "DESCONOCIDOS" salgan a brillar de la noche a la mañana en nuestra pelota, como Héctor Sánchez. Ahora viene la pregunta al revés ¿cuantos peloteros "DESCONOCIDOS" no ha ni jugado un solo juego en Venezuela debido a que en USA los dejaron libres y aquí nadie se interesó ya por ellos?. ¿Estamos seguros que eran tan malos o sencillamente NADIE TUVO PACIENCIA? … ya para acabar ¿Cuantos jugadores de verdad permanecen en la MLB?. nos enorgullecemos de los 200 y pico pero de esos solo un 20% o menos ha triunfado o permanecido en MLB. El resto se queda en el camino. Solo revisen los númeritos y veremos que el "orgullo" de ser grande-liga es una ficción plausible solo para unos cuantos, un puñado año tras año.

    Entonces peloteros hay, tenemos que desarrollarlos, eso es todo. 5 o 10 años para desarrollar una súper liga de verano. Fanaticada hay, de eso es de lo que más hay. Lo que falta es cerrar los compromisos adquiridos a medida que se venzan los plazos con MLB y la asociación del caribe y TENER EL VALOR para cambiar. Para ser mejores, para tener MÁS y MEJOR BÉISBOL.

    Saludos
    Oscar

    ¡QUIERO MÁS y MEJOR BÉISBOL!

  3. Coincido con Oscar, pero eso no sucederá pronto, es un proceso largo y que puede ser doloroso. Hay que ir paso a paso.

    Soy partidario de volver a la liga con dos divisiones SINCERAS y sus respectivos juegos "interdivisiones":

    Oriental: Bravos – Caribes – Caracas – La Guaira
    Occidental: Zulia – Lara – Aragua – Magallanes

    Abandonar el paradigma de que Magallanes y Caracas deben estar en la misma división, los demás equipos no pueden estar supeditados, al negocio que representan los eternos rivales. No hay justificación.

    Dos clasificados por ambas divisiones. Dos semifinales y la gran final. De esta forma hay lapsos sanos para descanso de jugadores. De esta forma nos evitamos espectáculos como los últimos juegos del Zulia. Mas juegos no necesariamente es más ganancia para los equipos, creo es todo lo contrario.

    Otra cosa es eliminar la ridiculez de los refuerzos, hay una liga paralela con jugadores de sobra, que no tienen experiencia, si. Pero si no los ponen a jugar que experiencia van a tener. Allí esta el Magallanes, ¿Era necesario traer a un importado a ultima hora, como Corey Eldridge, fuera de timing, que no le pegaba a la bola ni con una puerta?, teniendo prospectos como Johermyn Chavez, por ejemplo.

    Oigo mucho en TV decir a los comentaristas que esta es la mejor liga del Caribe. No lo creo, con cosas como las de ayer, ese titulo está en veremos. Que los 8 directivos de equipo firmaron las condiciones, fino. Pero eso no quiero decir que sea lo mejor. Una cosa es estar reunido en una mesa y establecer normas bajo hipótesis, y otra muy distinta ver como un equipo juega 29 innings en un poco mas de 24hrs

    La liga necesita hacer un profundo análisis y mea culpa, para mejorar la estructura del campeonato, en un formato que esta vencido y no se se adapta a las necesidades deportivas, ni mucho menos a las exigencias de los fanáticos, quienes pagando entradas y sintonizando juegos, producimos las ganancias de los equipos.

    Cambiar el formato, debe incluir cosas como:

    – Calendario
    – Derechos de transmisión mas equilibrados, dos canales transmitiendo un mismo juego es absurdo
    – Código de ética ( Para evitar casos como los de Yorvit y shows lamentables como los de Alex Cabrera y otros que "perrean" al contrario)
    – Arbitraje, este año vi decisiones increíbles y mediocres que empañaron el juego
    – Remodelación y mantenimiento de los estadios.

    Bueno, gracias por este espacio y saludos a Ignacio, a todos lo que pasan por aquí y aman este gran deporte.

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