«La Pesadilla» ya es elegible para entrar al
Salón de la Fama de Valencia. Adora jugar aquí, pero su contrato con los Leones fue casi el fruto de
la casualidad y en un comienzo vino como un pelotero de relleno. Esta es la historia
Luis Ávila
hizo click con el botón izquierdo del mouse y en la pantalla de su ordenador
apareció, por primera vez, el nombre del jugador que, con el correr de los
años, se convertiría en el importado más aplaudido de los Leones desde los
tiempos del inmortal Diego Seguí.
de 2008, el presidente del Caracas revisaba los números de la Liga de la Costa
del Pacífico, categoría triple A, en busca de pistas para completar la
importación.
abierta la página de Baseball America
y decidí ordenar los bateadores a partir de su OPS”, relató Ávila, un
entusiasta seguidor de la sabermetría. “De pronto algo me llamó la atención.
Era Josh Kroeger. Alguien con ese OPS podía sernos de ayuda”.
era, hace cinco años, un discreto ex grandeliga con muy poco recorrido en las
mayores: apenas 22 juegos con los Diamantes de Arizona, en 2004. Pero la suma
de su promedio de embasado y su slugging resultaba cautivante.
me sonaba”, continuó Ávila. “Después recordé que había sido un importado de las
Águilas, de malos resultados”.
experiencia de este patrullero californiano terminó con su despido. En
Maracaibo, en 2006, le llamaban “la Pesadilla” por motivos muy diferentes.
palabras también nació del parecido de su apellido con el personaje cinematográfico
de terror, Freddy Krueger. Era puro sarcasmo zuliano, por la línea de
.248/.354/.384 que dejó a su paso por occidente.
que su mocedad de entonces pesó. “Era muy joven”, dijo. Tenía 24 años de edad y
nunca había jugado en el extranjero, pero consiguió otra oportunidad y terminó subiéndose
a un avión rumbo a Maiquetía, dos años después.
estaba por concretar la última casualidad en su camino al estrellato.
esa temporada”, la 2008-2009, recordó Ávila. “No habría empezado a jugar, de no
ser por Cedric Bowles”.
uno de los pitchers contratados para ese campeonato, el típico refuerzo
extranjero que se convierte en el dolor de cabeza de la gerencia: tres veces le
enviaron el pasaje y tres veces perdió el vuelo, con distintas excusas.
de eso, ni lo volvimos a llamar”, exclamó Ávila. La hora de la verdadera “Pesadilla”
estaba por empezar.
el cupo de Bowles, ya que estaba vacante, y en vez de ir a la paralela,
apareció en el lineup del equipo grande. Él cambió los planes del Caracas y el
Caracas cambió su vida.
su quinta campaña aquí y ya es elegible para el Salón de la Fama del Beisbol
Venezolano, que tiene su sede en el Museo del Beisbol, en Valencia.
un jugador importante, tomando en cuenta mi carrera en Estados Unidos”, confesó
el toletero zurdo. “No tenía idea de que esto iba a pasar”.
construido un sólido currículo, que incluye dos títulos, una línea ofensiva de
.300/.406/.490 y un premio como Jugador Más Valioso. Para ser elegible necesita
cinco campañas de servicio y acumular cifras. Tiene ambas cosas, pero nada de
eso le había quitado el sueño hasta ahora.
disfruto, cuando vengo a Venezuela, es jugar los playoffs”, sonrió. “La
intensidad que hay, la forma de comportarse de la fanaticada en las tribunas. Es
mucho más intenso, y significa muchísimo más de lo que normalmente vivo en
triple A”.
más emocionante de su carrera ocurrió contra Magallanes.
es un empate de dos momentos”, aclaró. “El primero es haber ganado el último
juego de la final y poder ser campeones (contra los turcos, en 2010). El otro
fue el jonrón con tres en las bases que disparé esta temporada, para dejarlos
en el terreno”.
contento con su rendimiento en este torneo, porque no le gustaron sus registros.
mejor que me repitas la pregunta dentro de dos semanas”, agregó, en referencia
a la carrera por la final.
contento. No admitirá con tanta antelación que repetirá a Kroeger, pero reconoce
que es el tipo de importados que desea traer todos los años.
que quedaron con el equipo y la afición, sería ideal si pudiéramos estructurar
una importación a partir de Henry Wrigley, Brandon Barmes y él”, soltó el
ejecutivo.
ve muy claro. Quiere venir una y otra vez: “Hasta que me den una patada para
botarme”.
lugar ganado en la papeleta del Salón de la Fama del beisbol venezolano y a
este paso es muy probable que consiga muchos votos cuando se retire.
llegado a considerar algo así”, terció Kroeger. “Si sucediera, me permitiría finalmente
mostrar algo por haber jugado beisbol. Sería el logro más importante en toda mi
carrera”.
que ha sido una pesadilla para sus rivales en Venezuela. Y ha sido un dulce
sueño para él.
Josh
Kroeger es consciente del trato que le dan los aficionados, los mismos que
pitaron a Henry Wrigley cuando apenas tenía una semana en el país. “Realmente
aprecio la forma en que me apoyan”, expresó. “Nunca me han tratado mal. He
visto que son muy impacientes con mis compatriotas, pero conmigo siempre han
sido grandiosos”
Kroeger aclara que no sale mucho ni ha recorrido Venezuela como le gustaría,
porque no le sobra tiempo libre y en sus vacaciones procura estar en Estados
Unidos con su hija de cinco años de edad, a la que apenas ve.
que más me gusta es la cultura. Disfruto mucho ver cómo es la gente aquí”,
señaló.
plato favorito. “Como muchísimo pollo”, soltó riendo. “Disfruto que la comida
sea más natural que en mi país. A mi novia le gusta comer cachapa. No me parece
mala, pero todavía me estoy adaptando a todo el queso que le ponen”.
para él es conseguir los desayunos que le gustan, por la hora en que se
levantan los peloteros.
tipo de música, hasta reaggetón”, confesó. “El mejor iPod del equipo es el de
Darren Ford, porque tiene de todo”.
muchas migas con sus compatriotas. “Estuvieron muy poco tiempo con el club”,
explicó. En cambio, disfruta el colorido que impregnan en la cueva Juan Carlos
Gutiérrez y Darwin Cubillán. “Son grandiosos”.
viviendo en Venezuela, sin embargo. “No podría vivir lejos de mi hija. Estar sin
ella es duro. Pero deseo seguir viniendo mientras pueda jugar”.
Y nosotros los caraquistas estamos felices y agradecidos de contar con un importado como él. Ojalá siga viniendo todos los años hasta que se retire.
Kroger es el jugador mas importante para el Caracas de los últimos años. En el partido contra Lara dejó 3 hombres en base fallando con fly, luego con 3 en base de nuevo se ponchó viendola pasar, el Estadio Universitario era una catedral, silencio sepulcral! No hubo pitas y ni reproches para el jugador que mas satisfacciones le ha dado al fanatico caraquista, exigente por de más. Algo que ni el gran Bob Abreu pudo lograr en el Estadio de la Ciudad Universitaria esta temporada.
a kroger se le perdona todo asi de sencillo el tipo juega con el alma y la mente super inteligente como sabia que estaba en slump, usaba un bate mas pequeño buscando contacto, lastima las cosas no salieron este año ya vendran tiempos mejores, el beisbol actual es muy duro la falta de pitchers deja todo a una especie de doble suerte primero que los brazos no fallen, si fallan que sea poco y luego caerle a batazos al otro si siempre estas en desventaja es mas dificil.
SI JESUS GUSMAN TUVIERA A JOSH KROGER AL LADO TENDRIAN Q TENERLE MIEDO A LOS LEONES