El antiguo jonronero nacido en el estado Vargas tiene un gran caso en la elección de este año para nuestro Salón de la Fama
¿Qué
hacemos con Luis Raven? ¿Dejarlo pasar en la planilla o darle el voto para el Salón
de la Fama?
El año
pasado, una mayoría —de la que formamos parte— lo dejó fuera.
pasado, una mayoría —de la que formamos parte— lo dejó fuera.
Necesita 75
por ciento de los votos y encara una nueva elección, en la que no hay
candidatos indiscutibles, como en las ediciones anteriores lo eran Luis Sojo o
Andrés Galarraga.
por ciento de los votos y encara una nueva elección, en la que no hay
candidatos indiscutibles, como en las ediciones anteriores lo eran Luis Sojo o
Andrés Galarraga.
Se abre una
brecha para él y para algunos de sus compañeros de generación, como Edwin
Hurtado y Omar Daal, o para los héroes postergados, Leonel Carrión, Leonardo
Hernández y Oswaldo Blanco.
brecha para él y para algunos de sus compañeros de generación, como Edwin
Hurtado y Omar Daal, o para los héroes postergados, Leonel Carrión, Leonardo
Hernández y Oswaldo Blanco.
¿Tiene Raven
los méritos? ¿Merece una estatuilla en el templo de Valencia?
los méritos? ¿Merece una estatuilla en el templo de Valencia?
Raven no
llegó a las grandes ligas, lo que pesa en contra de su candidatura. Brilló justo
al comenzar el auge que hoy disfrutamos, a partir de la instalación de las academias
en el centro del país. Pero el Museo del Beisbol en Venezuela deja claro que
son elegibles para el Salón de la Fama todos aquellos que han hecho historia en
nuestra pelota, bien sea en la gran carpa, en otros circuitos internacionales
y, por supuesto, en la LVBP.
llegó a las grandes ligas, lo que pesa en contra de su candidatura. Brilló justo
al comenzar el auge que hoy disfrutamos, a partir de la instalación de las academias
en el centro del país. Pero el Museo del Beisbol en Venezuela deja claro que
son elegibles para el Salón de la Fama todos aquellos que han hecho historia en
nuestra pelota, bien sea en la gran carpa, en otros circuitos internacionales
y, por supuesto, en la LVBP.
El
varguense es un caso atrayente, ubicado justo en el borde.
varguense es un caso atrayente, ubicado justo en el borde.
Fue uno de
los mejores jonroneros de la liga, mientras jugó.
los mejores jonroneros de la liga, mientras jugó.
Estuvo a
punto de alcanzar la marca de Baudilio Díaz, cuando dio 18 cuadrangulares con
Pastora, en la campaña 1998-1999.
punto de alcanzar la marca de Baudilio Díaz, cuando dio 18 cuadrangulares con
Pastora, en la campaña 1998-1999.
Fue figura
del Magallanes, aplaudido refuerzo del Caracas y cuarto bate de Lara, La Guaira
y Zulia.
del Magallanes, aplaudido refuerzo del Caracas y cuarto bate de Lara, La Guaira
y Zulia.
Conectó 94
vuelacercas y se retiró en el tercer puesto de todos los tiempos, sólo por
detrás de Antonio Armas y Robert Pérez.
vuelacercas y se retiró en el tercer puesto de todos los tiempos, sólo por
detrás de Antonio Armas y Robert Pérez.
Sumó,
además, 401 carreras impulsadas, una meseta que únicamente habían alcanzado
Camaleón García, Vitico Davalillo, Armas y Leonardo, y que después fue
conquistada también por Pérez y más recientemente por Eliézer Alfonzo.
además, 401 carreras impulsadas, una meseta que únicamente habían alcanzado
Camaleón García, Vitico Davalillo, Armas y Leonardo, y que después fue
conquistada también por Pérez y más recientemente por Eliézer Alfonzo.
Visto desde
ese punto de vista, es un inmortal. Es impensable que uno de los mejores
jonroneros y empujadores del torneo local esté por fuera del Salón de la Fama,
tras haber conseguido todo eso en sus tiempos como activo.
ese punto de vista, es un inmortal. Es impensable que uno de los mejores
jonroneros y empujadores del torneo local esté por fuera del Salón de la Fama,
tras haber conseguido todo eso en sus tiempos como activo.
Pero no es
tan fácil. Raven dejó un average de .267, lo que importa poco cuando se es un
forzudo, y su slugging, que sí importa, es de apenas .431, al menos según
nuestras limitadas y siempre imprecisas estadísticas históricas.
tan fácil. Raven dejó un average de .267, lo que importa poco cuando se es un
forzudo, y su slugging, que sí importa, es de apenas .431, al menos según
nuestras limitadas y siempre imprecisas estadísticas históricas.
¿Cómo un
jonronero, si realmente fue uno de élite, no ronda .500 en el promedio de
extrabases?
jonronero, si realmente fue uno de élite, no ronda .500 en el promedio de
extrabases?
Menos
imprecisos son los numeritos que puso en las menores y allí su línea fue
brillante en 15 temporadas, con .288/.340/.494. Sin contar su paso por México,
el nativo de La Guaira descargó 197 batazos de vuelta completa y llevó a casa
838 rayitas en las granjas, incluyendo topes de 31 y 116 en 1994, cuando pasó
de doble A a triple A y parecía que llegaba a las mayores.
imprecisos son los numeritos que puso en las menores y allí su línea fue
brillante en 15 temporadas, con .288/.340/.494. Sin contar su paso por México,
el nativo de La Guaira descargó 197 batazos de vuelta completa y llevó a casa
838 rayitas en las granjas, incluyendo topes de 31 y 116 en 1994, cuando pasó
de doble A a triple A y parecía que llegaba a las mayores.
¿Por qué no
lo subieron? En parte por su defensiva. Aunque en algún momento hasta lo
pusieron a jugar en la antesala, como un modo de encontrarle lugar, en realidad
fue un inicialista corpulento, sin posibilidad de cubrir los jardines, en un
tiempo donde abundaban los bateadores de poder: la Era de los Esteroides.
lo subieron? En parte por su defensiva. Aunque en algún momento hasta lo
pusieron a jugar en la antesala, como un modo de encontrarle lugar, en realidad
fue un inicialista corpulento, sin posibilidad de cubrir los jardines, en un
tiempo donde abundaban los bateadores de poder: la Era de los Esteroides.
Hizo
méritos para llegar, pero no había cupo para él en Anaheim, y ya no era un
prospecto cuando brilló en las sucursales de Cleveland y Chicago, que prefirieron
darle la oportunidad a sus verdaderos prospectos, como ocurrió en 1997 con Magglio
Ordóñez, estando ambos con los Medias Blancas. Ernesto Mejía o Luis Jiménez pueden
contar historias así.
méritos para llegar, pero no había cupo para él en Anaheim, y ya no era un
prospecto cuando brilló en las sucursales de Cleveland y Chicago, que prefirieron
darle la oportunidad a sus verdaderos prospectos, como ocurrió en 1997 con Magglio
Ordóñez, estando ambos con los Medias Blancas. Ernesto Mejía o Luis Jiménez pueden
contar historias así.
¿Y entonces?
¿Merece la inmortalidad?
¿Merece la inmortalidad?
Sólo hay tres
bateadores en la LVBP que comparten tantos jonrones, extrabases, empujadas y
bases alcanzadas: Armas, Pérez y él, quien fue una de las más grandes
referencias del bateo en los años 90 y en la década pasada.
bateadores en la LVBP que comparten tantos jonrones, extrabases, empujadas y
bases alcanzadas: Armas, Pérez y él, quien fue una de las más grandes
referencias del bateo en los años 90 y en la década pasada.
Un gran caso.
Publicado en El Nacional, el miércoles 23 de octubre de 2013.
Raven merece ingresar, el que haya o no llegado a las mayores no debe influir, este es el Salón de la Fama de la LVBP no de MLB, hay votantes que creen que se premia lo que hacen afuera y no lo que hicieron en casa, por eso aún no hay trascendencia en los medios para difundir a los integrantes del Salón de la Fama de la LVBP
Claro Que lo merece Todo el mundo sabe que en esta liga tener de por vida 90 o mas jonrones es un logro importante además Fue novato del año si no me equivoco en la 94-95 Espero que voten por el YO votaría por el!!!