El doble conectado por Wilson Ramos el sábado ante Pittsburgh tuvo un significado muy particular que reposará en los anales de la historia de las Grandes Ligas. Además de lo peculiar de la conexión, el tubey sirvió para dar a lo Nacionales su victoria 68 de la temporada y mantener la primera posición del Este de la Liga Nacional a seis juegos sobre los Bravos.
Washington igualó la pizarra a tres rayitas en la octava entrada ante Pittsburgh y en la novena, Ramos dio un doblete por regla que sirvió para imponerse a los bucaneros 4-3.
La conexión del careta carabobeño, acabó con 61 victorias de los Piratas a la franquicia tanto en Montreal como en la capital de los Estados Unidos por un mínimo de tres carreras a la altura de la octava entrada o más tarde en el juego, según Elias Sports Bureau.
Además, la derrota fue apenas la cuarta que le propinan a los Piratas la franquicia como Expos o Nacionales en esas mismas circunstancias de un encuentro.
Según los registros, la última vez que los Piratas perdieron en Washington después de liderar la pizarra por tres o más carreras a la altura de la octava entrada, fue en 1895 siendo el hogar de los Senadores.
Fernando Martínez