Junior Guerra: «Una final no se juega todos los días»

Junior Guerra fue la primer escogencia del draft de la
final. Su actuación durante toda la temporada en la LVBP lo hizo merecedor de
tal privilegio. El comienzo no se metió en la lista de disponibles porque
quería descansar, pero luego cambió de opinión.

“La gente de los Medias Blancas consideró que debía parar porque tenía 100 innings lanzados”, dice. “Pero después pensé: una final no se
juega todos los días. Me voy a meter en la lista. Y me agarró Caribes de
Anzoátegui”.

El derecho considera que la preparación mental en esta final
es fundamental. “Hay que prepararse mentalmente porque van a ser siete juegos
sin descanso”, comenta. “Los que se van a ver más afectados son los peloteros
de posición y lo relevistas”.

El derecho en cuestión viene de ser líder en ponches de la
temporada regular, con 82 abanicados en 78.0 entradas de labor. En 15 juegos
solo le sacaron la bola cuatro veces y dejó marca de 6-4 y efectividad de 3.46
con Whip de 1.10.

“La recta este año estuvo bien”, aclara. “Pude combinarla
muy bien con mi split (recta de dedos separados) y sobre todo tire strikes. Ese
fue el secreto que me ayudó este año”.

Tan destaca fue la temporada que no solo saboreó el
privilegio de ser el primero en ser tomado en el draft, sino que terminó siendo
el as de los Tiburones de La Guaira, equipo para el cual juega en la LVBP. “Ese
tipo de cosas uno no se las imagina”, destaca. “Vienen con el trabajo que se realiza
a lo largo de la campaña”. 

Alfredo Villasmil Franceschi