Los Navegantes del Magallanes habían perdido tres de sus últimos cinco compromisos. Ese detalle en un evento corto, como lo es el Round Robin, es una situación complicada para la recta final de la justa. El mánager Wilfredo Romero hizo movimientos para buscar la ofensiva que se había apagado y le funcionó, en especial con el brasileño Leonardo Reginatto.
«Creo que hicimos los movimientos correctos para buscar el bien del equipo», celebró el piloto después de vencer a los Caribes de Anzoátegui en la jornada dominical. «Lo que hacía falta era la ofensiva y hoy fue un día bueno».
El infielder fue la figura del club al dar par de sencillos en cuatro turnos, fletó la primera carrera de su novena y la que le dio un respiro después de un jonrón de Balbino Fuenmayor. Ese cuadrangular había acercado a los aborígenes 5 por 3 en el quinto inning.
Pero ese cohete de Reginatto aumentó la diferencia a tres carreras y después la ofensiva de los turcos explotó para sentenciar a los indígenas 12 por 3, después de un Grand Slam de Rayder Ascanio.
«Pude tomar turnos con hombres en base y traté de poner la bola en juego», festejó el nativo de Curitiva en declaraciones compartidas por el departamento de prensa del club. «No queremos ser el héroe del juego sino poner la bola en juego, tener más enfoque y así fue».
El bateador derecho había fallado sus 16 turnos previos al duelo contra los orientales. Estaba en un slump al igual que muchos de sus compañeros. El sábado, ante el Cardenales de Lara, falló estrepitosamente en un episodio contra Jean Machí en donde tenía la carrera del empate a bordo, con un out y bateó para doble play.
El camarero fue una de las piezas que ajustó Romero en su lineup al bajarlo al séptimo lugar. El estratega subió a Pablo Sandoval como cuarto bate, Ángel Reyes como su predecesor y Nellie Rodríguez en el quinto peldaño. El jardinero Alberth Martínez reemplazó al dominicano Alejandro De Aza y Arturo Nieto al apagado Carlos Pérez.
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Era necesario el sacudón para levantar a una ofensiva que solo había producido 2 carreras en los dos últimos cotejos.
«Para todo el equipo era importante ese despertar y la ofensiva respondió», añadió el timonel. «Se dieron batazos importantes y el relevo vino solvente».
Por Marcos Grunfeld
El enfoque ofensivo como defensivo es primordial para todos los integrantes del equipo «Navegantes del Magallanes», y mantener esa química de grupo entre el manager, coach de picheo, coach de bateo, bat boy, los jugadores activos, los jugadores de banca, los fanáticos y la gerencia del equipo Navegantes del Magallanes. Nuestro norte es navegar a tierra firme enfocados siempre en obtener victorias.