Por Marcos Grunfeld
El estatus de Franklin Pérez llegó a tal punto que fue la pieza principal que recibieron los Tigres de Detroit para enviar a Justin Verlander, nada menos, a los Astros de Houston, en agosto de 2017. El escopetero tenía un enorme potencial y llegó a estar entre los 50 mejores reclutas de la gran carpa.
Pero las lesiones y la pandemia del COVID-19 detuvieron su desarrollo.
El valenciano, quien aún tiene pendiente debutar con los Tigres de Aragua en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, apenas ha podido lanzar 27 episodios con los bengalíes desde aquel cambalache.
En todo ese tiempo ha sufrido molestias en el brazo, en el hombro y también la pérdida de la temporada de las Ligas Menores en 2020. Eso debido a la pandemia del COVID-19. El embajador vinotinto tiene desde junio de 2019 sin lanzar una sola pelota en un juego oficial.
Porque, además, en mayo de 2021 requirió una cirugía en el hombro derecho.
«Me siento bien», confesó el carabobeño que se reportó, este viernes, a los campos de entrenamientos de ligas menores que ya abrieron.
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El monticulista lanzó a 120 pies de distancia en su primer día de entrenamiento y también a 60 pies. Todavía en terreno plano y no sobre el bullpen.
«Él ha estado trabajando duro», agregó el mánager A.J. Hinch al Detroit Free Press. «Él no lució nada bien en todo el Spring Training (del año pasado). Él estaba optimista y ese feedback ha sido positivo. Él ha tenido que pasar de lanzar más de 90 millas a reinventarse».
(Marcos Grunfeld)
